Las entidades financieras venden paquetes de morosos a estudios jurídicos de otras jurisdicciones, que reclaman montos muy superiores al original. Instan a usar con responsabilidad los plásticos, en un contexto en el que son utilizados para gastos corrientes.

Advierten que las tarjetas de crédito venden las deudas de sus usuarios a estudios jurídicos de otras jurisdicciones, los cuales reclaman montos muy superiores al original. Se trata de una situación que se ha agravado debido a que, por la crisis económica, los plásticos se utilizan para cubrir gastos corrientes.


SITUACIÓN

Como se ha mencionado en ediciones anteriores de EL LIBERTADOR, la inflación y el deterioro salarial ha provocado que las personas utilicen las tarjetas de crédito para gastos ordinarios, como comprar en supermercados y farmacias. Esa situación decanta en que los índices de morosidad aumenten, ya que el resumen mensual suele volverse impagable.
En este contexto, las entidades financieras se desentienden de las deudas de sus clientes, vendiéndolas a grupos de abogados de otras jurisdicciones. "Cuando el cliente se atrasa o cubre sólo el mínimo y después se le hace imposible pagar, la empresa le suspende el servicio pasados los tres meses y trasladan lo adeudado a estudios jurídicos de Rosario, Córdoba o Buenos Aires", comentó a este medio el presidente de la Asociación de Usuarios y Consumidores (AUC) de Corrientes, Nelson Veas Oyarzo.
Al respecto, describió un caso en el que un estudio jurídico porteño "pedía a la titular de una tarjeta de crédito 45 mil pesos, con intereses honorarios y gastos administrativos, pero planteaban que si se hacía un pago de 25 mil, hasta en seis cuotas, se solucionaba el problema".
Oyarzo planteó que lo descripto demuestra que las firmas de abogados "están ávidas de dinero", dado que los montos planteados "no tienen ningún sentido". Además, aseguró que ese tipo de situaciones "se multiplican tanto en Corrientes como en el resto del país".
Luego, mencionó que esa metodología hace que las negociaciones por la deuda "se compliquen, porque el deudor tiene que contratar un abogado de otra jurisdicción o viajar hacia allí", debido a que "una vez que la deuda sale de las delegaciones locales de las tarjetas, ya no se puede gestionar nada a nivel local".

GASTAR CON
CAUTELA

El entrevistado destacó que para evitar inconvenientes como los mencionados "es importante que la gente no pague sólo el monto mínimo requerido para mantener el servicio y cubra la totalidad de los gastos que tiene la tarjeta, porque los intereses son leoninos".
Continuando con lo anterior, expuso que una vez que la deuda está judicializada "se transforma en una bola de nieve, y como hay pagarés firmados se ejecutan sobre los bienes como la vivienda y el sueldo".
Para finalizar, el Presidente de la AUC recomendó que "las personas tengan sumo cuidado con sus tarjetas y no gasten más de lo que pueden pagar, porque después vienen los problemas que son bastante acuciantes".

Miércoles, 29 de agosto de 2018