El indicador Okun para Argentina fue el más alto de la región, excluida Venezuela, seguido por Brasil y Colombia. El objetivo oficial de pobreza cero, como aspira el Gobierno naicional, es un trabajo de varios años. Pero parece que la marcha no sólo es lenta, sino que se ve afectado por la aceleración del ritmo inflacionario.

Eso fue lo que rápidamente captó el "índice de miseria" que elabora la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad del Salvador (USAL).

Se trata de un indicador que suma la tasa de inflación anualizada de cada trimestre y la tasa de desempleo que informa el Indec a nivel nacional. Para el último tercio de 2017 arrojó un aumento del 12%, tanto respecto de igual trimestre del año previo, como en comparación con los tres meses previos, ascendió a 34,2 púntos.

El informe de la casa de altos estudios detectó que el llamado Índice Okun creció en todas las provincias, excepto en Mendoza.

El componente inflacionario, que pegó particularmente fuerte a fin del año pasado, terminó comiéndose la tendencia a la baja que mostró el año pasado la variable del desempleo.



La miseria en los países

En términos de posición, Córdoba fue la provincia que encabezó el relevamiento, con 35,4 puntos, mientras Mendoza ocupó el último puesto del ranking, más de 10 puntos porcentuales debajo.

A nivel regional, en Sudamérica el podio de la miseria estuvo compuesto por Argentina, Brasil (16,5) y Colombia (10,7).

El mundo 'desarrollado', por otro lado, parece estar dividido en la misera por el Océano Atlántico, con los mayores índices en el "Viejo Mundo": España 22,4 y Francia 11,6, y los menores en el "Nuevo Mundo": Estados Unidos 3,4 y Canadá 5,5, puntos.

De acuerdo con la metodología de trabajo se proyecta una nueva suba del índice trimestral, aunque podría ser igual o incluso inferior al nivel correspondiente al de los primeros tres meses del año anterior.

Jueves, 19 de abril de 2018