El esperado verano llegó: para algunos, la estación más sexy del año; para muchos, la estación más “sexual” de todas. Es cierto, el verano pareciera ser la época que más nos predispone a tener sexo y a buscar aventuras más placenteras.

Pero si en tu casa la pasión no llega con el cambio de estación, o peor aun, se “derrite” por el calor y la humedad, no te conformes con poco. Hay formas de recuperar la pasión que requieren de tu imaginación, un poco de protector solar y quizá otro poco de lubricante.

Drive in Movies: Ponte un pañuelo en la cabeza, levanta la capota del auto y vete con tu hombre a ver una película al aire libre al estilo Drive In, como se hacía antes, pero que aún hoy puedes experimentar en varios lugares en Estados Unidos. Escoge un clásico para ver, pero la verdad es que la película es lo de menos. Lo ideal es que crees un ambiente romántico y seductor para que cuando lleguen los títulos anunciando el final de la cinta, tú sepas exactamente dónde comienza tu propia película (de placer).

Playita: Nada más relajante que un poco de sol, mar, arena. El olor del océano, la brisa del mar, todo confluye para crear un ambiente perfecto para renovar la pasión en pareja. Después de unas horas al sol, o mejor aun, de ver el atardecer juntos (con unas cervezas frías o vino blanco bien frío), lleva a tu compañero al hotel o la cabaña y dale broche de oro a una jornada especial, sin que te importe si tienes restos de arena en los pies.

Camping: Quizá eres de esas a las que la idea de hacer camping les aterra. Pasar una noche lejos de la “civilización”, sin acceso a internet o a luz eléctrica, en una carpa de dos x dos, sin tele ni aire acondicionado, y probablemente en compañía de insectos y sapos puede sonar poco atractivo, pero puede resultar en algo muy interesante. Si no te animas a la pura aventura, prueba a hacer camping en el patio de tu casa o en algún parque no muy lejano que tenga espacio para campamento. Puede ser que esa noche de carpa se convierta en la más recordada del verano.

A la terraza: Invita a tu pareja a encontrarse contigo en una terraza con una vista interesante. Disfruta de la brisa, de los tragos, del atardecer en pareja. Ponle una vibra sensual a tu velada y deja que se convierta en el rato previo a una noche de puro placer.

Duerme desnuda: El verano es la excusa perfecta para quitarte la ropa cuando duermes. El contacto de tu piel con la de él te hará sentirte sexy, relajada y más que lista para intimar con tu hombre, y a él le encantará sentir tu cuerpo desnudo toda la noche.

Baila, bajo las estrellas: Las noches de verano pueden ser mágicas, en especial si se pueden ver las estrellas y el repelente de mosquitos es efectivo. El baile bajo las estrellas puede ocurrir en tu balcón o en una fiesta, lo importante es la conexión y el momento que ambos generen para revivir la pasión de pareja.

Jueves, 4 de enero de 2018