A lo largo y ancho del Departamento se encuentran lugares inaccesibles por el agua, como la ruta Nº 126, sobre el arroyo Barrancas. Los afectados no dejan sus viviendas, y la Comuna releva las pérdidas productivas.

La situación hídrica de la mayor parte del departamento Esquina, compuesto por las localidades de Esquina y Pueblo Libertador, se volvió a agravar tras las nuevas lluvias.
En diálogo con EL LIBERTADOR, el intendente esquinense, Humberto Bianchi, confirmó que llovieron más de 400 milímetros los días pasados, cerca de 300 en la zona rural y otros 100 en la localidad.
De esta forma, más de 400 familias de la cuarta sección Malvinas continúan afectadas por las inundaciones y asistidas por los estados municipal y provincial.
A los cientos de damnificados de los parajes Malezal y Cuchillas, ubicados al Norte de la sección Malvinas, se suma un número indeterminado de la zona Sur, donde los excedentes del río Corriente, desde Perugorría y las últimas precipitaciones, provocaron el desborde del arroyo Barrancas y el corte total de la Ruta Provincial Nº 126.
Acorde al Jefe comunal, muchas familias se rehúsan a abandonar sus casas y haciendas, a pesar de que se prevén peores inundaciones por las crecidas de los ríos Paraná y Uruguay entre febrero y marzo.
"Hay calles y caminos destruidos, y zonas totalmente inaccesibles; y según el pronóstico, la situación seguirá empeorando", alertó.
Consultado sobre la asistencia a los afectados, detalló que se entregan alimentos, ropas y medicamentos durante las recorridas diarias por las zonas más difíciles de acceder, incluyendo antibióticos para las cortaduras de pies, uno de los principales accidentes por la cantidad de agua.
Todavía no se atendieron casos de picaduras de víboras, y la Dirección de Salud cuenta con stock de suero antiofídico.
En tanto, la Dirección de Producción y el Ministerio de Producción relevan en conjunto las pérdidas ganaderas y agropecuarias.
El problema del primer sector son los pequeños productores que resisten en sus casas, con el peligro de que su ganado muera ahogado por las nuevas crecidas; en tanto una buena parte del segundo sector logró trasladar su producción.
A su vez, el intendente de Pueblo Libertador, Raúl Cañete, declaró la emergencia hídrica por el desborde de los arroyos que afectó a gran parte de su población.

Miércoles, 21 de enero de 2015