La sesión en el Concejo Deliberante de Santa Rosa fue una nueva puesta en escena que no hizo más que evidenciar el bajo nivel político e institucional de nuestras autoridades. Excusado en la asunción de Roxana Domínguez, el Ejecutivo Municipal llenó las instalaciones del SUM con invitados de la UTA que volvieron a copar Santa Rosa y protagonizaron disturbios, incluso uno de ellos fue demorado en la comisaría local.

La sesión de desarrolló en un clima tenso, los concejales se sintieron amenazados en todo momento por la prepotencia del viceintendente Juanjo Encinas que frente a los pocos vecinos presentes, porque en su mayoría eran miembros de la UTA, intentó demostrar y mentirse así mismo que él es el que sigue mandando, a fuerza de abucheos e insultos promovidos desde el oficialismo.

Nada fue espontaneo en la sesión de ayer. El concejal Eduardo López manifestó a El Litoral que “fue una sesión decepcionante”.“Sufrimos el atropello de la UTA, que incluso agredió a la hermana de la concejal Ferragut”. Al respecto, la edil señaló que su hermana fue empujada, y en otro momento a ella le tiraron el pelo, “y la verdad que estamos preocupados por esta situación y el estado de nuestras familias”.

Seguidamente indicó que “incluso un concejal en un momento tuvo que dirigirse al comisario que estaba en la sesión para que interviniera, y ellos mismos no lo podían controlar. Es más, no sé cómo serán las próximas sesiones”.

Concluido el show del Ejecutivo, queda la sensación de que en la sociedad santarroseña aún falta mucho por aprender de institucionalidad y democracia, resta aprender a convivir en paz, aceptar las diferencias y sin nada que esconder, responder a los pedidos de informes que requiere el Concejo Deliberante, cuya función es principalmente controlar la administración municipal.

Jueves, 21 de agosto de 2014