El Ejército de Siria recuperó hoy el control de tres ciudades de la estratégica región de Al Qalamun, cerca de la frontera con el Líbano, entre ellas la cristiana Malula, luego de combates con numerosos muertos, entre ellos tres periodistas del canal del grupo chiita libanés Hezbollah.

La captura de las tres ciudades deja al gobierno del presidente Bashar Al Assad casi en control total de Al Qalamun, al norte de Damasco, luego de una ofensiva de seis meses que dejó cientos de víctimas y forzó a decenas de miles de sirios a huir al Líbano para salvar sus vidas.

El movimiento islamista libanés Hezbollah, un aliado de Al Assad, envió combatientes que jugaron un papel central en la campaña en Al Qalamun, cuyo dominio permitiría al Ejército cortar los suministros desde el Líbano y desde el norte sirio a los insurgents que operan en la periferia de Damasco.

Un día despúes de retomar el control de la ciudad de Rankus y luego de intensos enfrentamientos contra combatientes de grupos islamistas, los soldados sirios recuperaron hoy Sarkha, Jibbeh y por último Malula, informó la agencia de noticias estatal siria SANA.

Fuentes militares sirias dijeron a SANA que las unidades del Ejército están persiguiendo a los insurgentes en los suburbios de Malula y que mataron a numerosos sublevados.

Los soldados comenzaron a desactivar "minas antipersonales y artefactos que implantaron los terroristas en la ciudad" cristiana, una de las pocas donde aún se habla y se reza en arameo, la lengua de Jesucristo, agregaron las fuentes.

El 2 de diciembres pasado, un grupo rebelde de los varios vinculados con la red Al Qaeda que pelean en Siria secuestró en Malula a 13 trece monjas del convento de Santa Tecla, que fueron liberadas el 9 de marzo.

Malula, con unos 5.000 habitantes, es estratégica para las autoridades de Siria, sumida en un sangriento conflicto interno desde hace más de tres años, ya que está próxima a la autopista que conecta Damasco y la ciudad central de Homs.

En el líbano, Al Manar, el canal de TV de Hezbollah, informó que tres de sus trabajadores murieron hoy en los enfrentamientos en Malula por "los disparos de terroristas extremistas", en referencia a los insurgentes que quieren derrocar a Al Assad.

Se trata de el periodista y corresponsal Hamza el Hach Hasan, el técnico Halim Alau y el cámarografo Mohamed Mantash, todos ellos de nacionalidad libanesa, informó Al Manar en un comunicado citado por la agencia de noticias EFE.

En el texto, el canal agregó que "varios compañeros resultaron heridos en el ataque", aunque no precisó si se trata de otros empleados de Al Manar o de periodistas de otros medios de comunicación.

Según Al Manar, los vehí­culos del convoy periodís­tico llevaban "claramente" señales de identificación de prensa.
Según la organización Reporteros Sin Fronteras, un total de 30 periodistas murieron en Siria desde que comenzó el conflicto, en marzo de 2011.

Por su parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), una organización opositora con sede en Londres que documenta las violaciones en el conflicto sirio, dijo en un comunicado que "francotiradores de las brigadas islamistas dispararon contra el equipo de la televisión libanesa Al Manar".

Además, según el OSDH, cuatro militares del Ejército sirio murieron por disparos cuando intentaban evacuar a los periodistas que habían sido atacados.

SANA también informó que el Ejército sirio se hizo con el control del monte Shalma, ubicado cerca de la ciudad de Qasab, importante por su cercanía al homónimo paso fronterizo hacia Turquía, que había sido tomado recientemente por los rebeldes.

Qasab fue tomada por los opositores a finales del mes pasado durante la ofensiva que estos lanzaron en la provincia costera de Latakia, uno de los feudos principales de Al Assad.

Martes, 15 de abril de 2014