Este fin de semana el escuadrón de bomberos voluntarios se vio alertado al 101 por un voraz incendio en una plantación forestal e eucaliptus. La misma se habría originado luego que un par de peones tras prepararse unos huevos fritos y consumir algo de alcohol se quedaran dormidos y el intenso viento hizo el resto. El foco ígneo fue tan intenso que recorrió la forestación por más de 150 metros hasta casi llegar a la finca de los moradores del campo. Tras una intensa tarea del cuerpo de bomberos se logró controlar el fuego.