MONSEÑOR CANECIN
Tengamos la capacidad de cuidarnos a nosotros y a los demás
Monseñor Adolfo Ramón Canecin, obispo de Goya, presidio la Vigilia Pascual en la Iglesia Catedral Nuestra señora del Rosario, Con el templo vacío sin la participación de los fieles por la pandemia del coronavirus. Fue transmitida en directo por los medios masivos de comunicación social.
El religioso dio a conocer su tradicional menaje de Pascua de Resurrección que expresa textualmente:
Queridos Hermanos: Como humanidad y dentro de ella, como Iglesia, estamos viviendo un tiempo, una Cuaresma, una Semana Santa y Pascua “inédita”; en aislamiento social obligatorio, como medida preventiva para cada uno y los demás, ofrecida como “la mejor vacuna” en estas circunstancias de pandemia global del Coronavirus.
A través de los diferentes medios de comunicación (radio, TV, redes sociales, etc.), podemos desde nuestras casas-Iglesias Domésticas-participar, celebrar y vivir creativamente los grandes Misterios de Nuestra Fe: la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor Jesús. Gracias a la Liturgia de la Iglesia, que “actualiza” el misterio que celebramos, somos contemporáneos del mismo, podemos hacer la experiencia de “tocarlo” y dejarnos “impactar” por él hasta transformar nuestras vidas, produciéndose así, una pascua-un paso-, expresión de “la Pascua del Señor”.
Los múltiples “gemidos” de los hombres y de la propia naturaleza, no son indiferentes sino asumidos por Jesús y llevados a la Cruz se expresan por sus labios: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? (Mt 27, 46) ... hasta terminar en la entrega filial confiada “Padre, en tus manos encomiendo mi Espíritu”. (Lc 23. 46).
“Con María Magdalena y la otra María, fuimos a visitar el sepulcro del Señor y nos sorprendió el ángel, diciéndonos: «No teman, yo sé que buscan a Jesús, el crucificado…No está aquí…Ha resucitado de entre los muertos”» (cfr. Mt 28, 1-10).” Esta es la más grande y definitiva Buena Noticia: ¡Jesús, ha Resucitado! ¡Vive y te quiere vivo! ¡Ha vencido a la muerte y hace nuevas todas las cosas! Con razón, San Pablo nos dice: “Comprendámoslo…si hemos muertos con Cristo, creemos que también viviremos con él”.
Sabemos que Cristo después de Resucitar, no muere más, porque la muerte ya no tiene poder sobre él” …ahora vive para Dios, también ustedes considérense vivos para Dios”. (cfr. Rm 6, 3-11).
Les deseo que, con la fuerza de la Resurrección que removió la piedra que tapaba el sepulcro: Podamos vencer todos los miedos y temores que genera la realidad actual.
Tengamos la capacidad de cuidarnos a nosotros y a los demás, quedándonos en casa y cumpliendo las medidas sanitarias. Vivamos en profunda solidaridad con las víctimas y sus familiares, rezando por ellos. Valoremos y expresemos gratitud hacia quienes nos están cuidando y velando por el bien común. Compartamos, viviendo en austeridad, nuestros bienes con aquellos que lo están necesitando.
Logremos extraer múltiples enseñanzas, en esta “Escuela de la vida”, y viviéndolas, acontezca una nueva humanidad., cuidando y protegiendo nuestra casa común. Será hoy nuestra manera de ser Testigos de la Resurrección con la vida y la palabra. Los saludo con un abrazo, deseándoles: ¡Feliz Pascua de Resurrección!
+Adolfo Ramón Canecin Obispo de Goya
Lunes, 13 de abril de 2020
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