El “congelamiento” de precios de los combustibles, establecido por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), generó una fuerte reticencia en el sector petrolero, como así también en las compañías que comercializan naftas y gasoil en todo el país.
A menos de una semana del DNU presidencial, en algunas provincias (como Córdoba) comenzaron a notarse retacéos en la distribución.

Desde los surtidores locales miran de reojo el conflicto entre las provincias petroleras, las compañías y el Gobierno. Advierten que aquí aun no hay desabastecimiento, pero sí se distribuye por cupo, teniendo como parámetro volúmenes de despacho del año pasado.

Aquí, en Corrientes, los hidrocarburos aún arriban en tiempo y forma, pero algunas banderas ya recibieron información de que se les enviará sólo el cupo asignado, respetando estimaciones de venta interanual.

En virtud de conocer cómo es ahora el “día a día” de una estación capitalina, época dialogó con Federico Romero Bieber, propietario de una expendedora emplazada en Armenia y Estados Unidos que comercializa productos Shell.

“No registramos desabastecimiento, lo que sí tenemos es envíos por cupo, que no es lo mismo. Actualmente, recibimos similar cantidad de litros que hace un año”, graficó.

“Esta escalada del dólar y consecuente ‘congelamiento’ de los precios nos alcanzó justo cuando se aplicó la estrategia comercial de ofrecer la nafta al mismo precio que YPF. Con esa competitividad en los importes, tenemos más demanda y estamos ante la oportunidad de hacer mayor volumen de venta. Ahora, por decisión de la empresa, se cumple sólo con el cupo prefijado”,amplió.

Consultado sobre qué pasará tras el 7 de noviembre, cuando expiren los 90 días de congelamiento, el empresario indicó que “dependerá de cuánto valga el dólar para esa fecha”.

“Si hoy se dejara sin efecto esa medida, la nafta debería subir unos 10 o 15 pesos. Lo cual, como es de prever, impactaría negativamente en las ventas de nuestro sector”, enfatizó Romero Bieber.

Ayer, el secretario general del sindicato del Petróleo y Gas Privado, Guillermo Pereyra, propuso trazar un sendero progresivo para que, al cabo de noventa días, se llegue a un precio de equilibrio para el crudo en boca de pozo -actualmente está congelado-, con un tipo de cambio igual al del mercado, que actualmente está en 57 pesos. Advirtió que el Gobierno pone en riesgo la “paz social” si continúa con dicha medida.

Difícil panorama

Las provincias petroleras Neuquén, Río Negro y La Pampa presentaron ayer ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación el pedido de inconstitucionalidad del Decreto de Necesidad y Urgencia que dispuso el congelamiento del precio del petróleo por 90 días, al argumentar que verán afectados sus ingresos por regalías, la reducción de la actividad y el riesgo de las inversiones.

A estas tres provincias se sumará hoy Santa Cruz, según fuentes de la gobernación de Alicia Kirchner, mediante “un amparo con medida cautelar” para evitar pérdidas estimadas entre $300 y 500 millones mensuales en ingresos por regalías.

Jueves, 22 de agosto de 2019