AUSMIO EN CURUZU
Padre Ariel Gimenez: "Goya fue echar raíces, abrir caminos y dejar huellas"
Fueron uno de los conceptos sobresalientes del padre Ariel Gimenez, cuando dirigio sus primeras palabras el viernes 22, pasadas las 19:30, en la toma de posesión como nuevo cura Párroco de Nuestra Señora del Pilar en Curuzú Cuatia. Estuvo presente el Obispo de Goya monseñor Adolfo Canecín y el Obispo emérito monseñor Ricardo Faifer y clero diocesano y religioso.
El viernes 22 de febrero se realizó minutos después de las 19:30, la toma de juramente del nuevo parroco en el Templo Parroquial de Nuestra Señora del Pilar y la toma de posesión del nuevo Cura Párroco, prebistero Jorge Ariel Giménez. Estuvieron presente Monseñor Adolfo Canecín y el Obispo emérito Ricardo Faifer, sacerdotes de las diferentes parroquias de la Diocesis de Goya, y también autoridades municipales colmando así las instalaciones de la iglesia parroquial. PADRE ARIEL GIMENEZ “Asumí como párroco en Curuzú Cuatiá, ya he estado aquí pero solo de cruce por motivo de rees, ya estuve averiguando sobre la rica historia de la ciudad, su fundación, su parroquia y es todo un desafío para mi esta nueva etapa”, comenzó diciendo el padre Ariel Giménez. Añadio: “Vengo de una parroquia más pequeña que esta, pero que estaba llena de vida, y duele un poco sacar esa planta con raíces y ponerlo en otro lugar, pero es para seguir dando más frutos”, agregó. “Mis primeros cinco años como cura fue un sueño (parroco de Sauce), luego en Goya fue echar raíces, abrir caminos y dejar huellas, fueron dos experiencias fuertes, pero llegar a “la sucursal de cielo” me da mucha alegría”, dijo el nuevo Párroco de Curuzú Cuatiá. Desde Goya partieron colectivos con los feligreses de la parroquia San Jose Obrero y acompañaron especialmente los jovenes de esta ciudad.
Lunes, 25 de febrero de 2019
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