San Isidro y Pueblo Libertador son dos de los municipios que aún sufren las consecuencias de las abundantes precipitaciones que -según el caso- derivaron en desbordes de afluentes naturales o en la acumulación excesiva de agua en algunas áreas. Ahora continúan con las tareas de asistencia y la semana venidera tienen previsto realizar gestiones ante el Gobierno provincial para que se ejecuten obras que mitigarían el impacto de las emergencias hídricas.

En la primera comuna, además, hay unas 40 familias evacuadas y unos 60 lugares de fabricación de ladrillos paralizados. Y en la segunda también hay tres poblaciones con dificultades. Desde ambos municipios pedirán ayuda a la Provincia para
ejecutar obras.



La intendenta Vilma Ojeda, al ser consultada por El Litoral, comentó que “el agua bajó pero todavía no lo suficiente”. Por eso, si bien se redujo el número de parajes aislados, la situación persiste en Pago Redondo, Rincón del Pago y Paso de los Angeles. En las dos primeras poblaciones mencionadas, inclusive “hay algunas casas que tienen agua en su interior”.
Pero Ojeda aseveró que sin dudas el mayor problema por estos días es que hay caminos que siguen anegados. “Hay zonas en el trayecto hasta Paso de los Angeles donde los caballos nadan. Lo más seguro es ir en canoa. Y en los otros casos se utiliza el unimog, aunque el jueves cuando se iban a llevar asistencia a San Antonio Islas sólo se pudo llegar con un tractor”, contó la Jefa comunal.
Con respecto a qué trabajos necesitarían en la zona para reducir el impacto de las inundaciones, Ojeda señaló que “hay en sectores que es casi inevitable que se inunden cuando las lluvias son tan abundantes. Pero hay obras que se podrían hacer y para lo cual solicitaremos ayuda a la Provincia”.
“Levantar un poco más el nivel actual de la ex Ruta 14, enripiarla y colocar más alcantarillas, como así también mejorar el puente de Bañado San Antonio, creo que al menos reduciría el impacto de las inundaciones”, estimó la Intendenta. Precisamente, para plantear la necesidad de ejecutar esos trabajos es que pedirá una audiencia con autoridades de Vialidad Provincial y del Ministerio de Obras Públicas.
Recuperación
“Acá también está bajando el agua porque la canalización que tiempo atrás realizaron en el arroyo Barrancas permite que al menos escurra un poco más rápido que antes”, expresó a El Litoral el intendente de Pueblo Libertador, Arnaldo Arce. No obstante, aclaró que el descenso todavía no fue suficiente para que se normalice la comunicación terrestre con varios parajes de la jurisdicción. Sobre esto, ayer precisó que “por el desborde del afluente todavía están aislados en Colonia Schweizer, Paso Cejas, Yunque, Cuchillas, Rincón de Sarandí y Malezal.
Mientras que “por acumulación de agua como consecuencia de las abundantes lluvias también están aislados los que viven en los parajes Laguna Itá, Abra Guazú, áreas aledañas e inclusive en el acceso a nuestra localidad tenemos familias afectadas”, consignó Arce. Señaló que “también tenemos más de 40 familias evacuadas que están albergadas en entidades públicas o en casas de parientes”.
“Cuando tengan que regresar tendremos que ayudarlas a reparar sus viviendas para que vuelvan a estar habitables”, consideró.

Daños
Arce acentuó que las tareas de asistencia no concluirían cuando cese la inundación. “Por ejemplo, acá hay unas 60 fábricas de ladrillo que están asentadas en cercanías al arroyo Barrancas, por lo que pasará mucho tiempo para que puedan volver a trabajar. Mientras tanto, esas familias subsisten con lo que cobran de ayuda social y con changas que puedan hacer”, planteó el intendente de Pueblo Libertador. Añadió después que “también estamos relevando el nivel de daños en el sector productivo”.
En tanto, anticipó que la semana venidera se reuniría con funcionarios provinciales. “Queremos solicitarles la limpieza y profundización de algunos desagües, la realización de nuevos y la construcción de alcantarillas”, puntualizó Arce.

Lunes, 28 de enero de 2019