Monseñor Adolfo Canecin, presidio la celebración eucarística y luego participo de un compartir fraterno con las jóvenes que residen en la Fazenda La Esperanza, ubicada en cercanías de la localidad de Santa Lucia. El obispo predico sobre el Evangelio y reflexiono sobre el pasaje de las bodas de Caná, en el que Jesús salva la celebración convirtiendo el agua en vino.

Monseñor Adolfo Canecin, retomo sus actividades pastorales el sábado pasado, luego de pasar unos días de descanso en Formosa, su ciudad natal y destaco que al escuchar el Evangelio nos encontramos ante el conocido pasaje de las bodas de Caná, en el que Jesús salva la celebración convirtiendo el agua en vino.

Monseñor Adolfo Canecin a manera de introducción en su predicación destaco que después de Navidad y Epifanía, y antes de llegar a la Cuaresma, se intercala un tiempo intermedio, en la liturgia de los domingos. El evangelio de hoy nos propone el relato de las bodas de Caná como “el primer signo que Jesús hace” y que preanuncia “tiempos mesiánicos”, y viene lo nuevo, todo aquello que Jesús realizará en su existencia.

Recordó que hace un mes atrás celebramos el nacimiento de Jesús, que se manifiesta como “Dios para todo el género humano” y recordó también que el 6 de enero celebramos la Epifanía del Señor que significa “manifestación” y en el pesebre se manifestó como “Dios para todo el género humano. El pueblo pagano de oriente representado en los magos presento oro, incienso y mirra, una celebración muy bonita que nos quiere decir que Dios es de todos los hombres, de ayer, hoy y siempre” fueron los conceptos iniciales de su predicación.

“Dios es Padre de todos y para todos” porque Dios quiere que “todos los hombres se salven” y continuo señalando que hemos celebrado “el bautismo del Señor, donde apareció la voz del Padre ´este es mi hijo muy amado´ y hemos contemplado el Espíritu en forma de paloma y el Hijo que sale del agua, una autentica Epifanía, una verdadera manifestación de Dios” reseño monseñor Canecin.

Este domingo “Dios se manifiesta para despertar nuestra adhesión atraves de la fe y esto es el lo que el Señor quiso y quiere, esta es la voluntad del Padre como nos dice Jesús ´que ustedes conozcan y vean al Hijo único que luz y es pan, porque no hay otro nombre dado a este mundo para alcanzar la salud y la vida eterna”.

FAZENDA

En la Diócesis de Goya, la Fazenda femenina de la Esperanza “Nuestra Señora de Itati”, esta situada a 2 kilometros de la entrada norte de Santa Lucía, Departamento de Lavalle en la Provincia de Corrientes.

“Fazenda de la Esperanza” es una asociación de fieles reconocida por la Iglesia católica que se dedica principalmente a la recuperación de jóvenes químico-dependientes. Su historia fundacional se remonta a Nelson Giovanelli, quien se acercó a un grupo de jóvenes que consumían y vendían drogas cerca de su casa.-



Jueves, 24 de enero de 2019