INSEGURIDAD EN CORRIENTES
Motochorro golpeó a una chica y fue apaleado por vecinos
El delincuente atacó a trompadas y patadas a una joven que resistió el robo de su teléfono. Testigos comenzaron a perseguirlo hasta reducirlo. A causa de la paliza que sufrió terminó internado en un hospital. Es un adolescente de 17 años de graves antecedentes.
Después de atacar a trompadas a una chica que se resistió al robo de su teléfono celular un “motochorro” fue perseguido y reducido a golpes por un grupo de “vecinos justicieros” en el barrio Víctor Colas de la ciudad de Corrientes. El maleante sufrió una paliza, quedó semi inconsciente y una vez que intervino la Policía debió ser internado en un hospital.
El acto de linchamiento ocurrió el viernes a la noche en la esquina de avenida J. R. Fernández y Remedios de Escalada, donde alrededor de 20 personas (hombres y mujeres) rodearon al malviviente y lo apalearon mientras le recriminaban su agresión violenta en perjuicio de una estudiante.
De acuerdo a información conocida por diario época, uno de los “justicieros” resultó con heridas en un brazo al ser rozado por un automóvil en el momento que corría al ladrón.
Mientras que la madre de la víctima, con quien hablaba por teléfono desde otra provincia justo al momento del ilícito, escuchó los gritos de auxilio de su hija y parte de los insultos que lanzaba el ladrón.
Cerca de las 21:15 la joven caminaba sola, dialogando vía celular con su madre cuando un malviviente se abalanzó y trató de quitarle ese teléfono.
La chica resistió. Forcejeó con el delincuente y éste la golpeó con patadas y un puñetazo en el rostro. Esa acción fue advertida por varias personas que estaban en la cuadra de J.R. Fernández, entre Escalada y Río Tercero, e intervinieron en defensa de la mujer.
El “motochorro” corrió hacia la moto en la cual lo esperaba su cómplice. Pero no pudo sortear la presencia de vecinos enfurecidos, quienes no le permitieron subir al vehículo. Fue seguido media cuadra hasta caer al piso y le propinaron una paliza mientras su compañero huía a alta velocidad temeroso de correr esa “mala suerte”.
Dos efectivos policiales de civil que pasaban de casualidad intervinieron y redujeron al malhechor hasta ser entregado, casi desmayado, a las autoridades de la comisaría Novena. Se trata de un adolescente de 17 años, con antecedentes de otras detenciones también en casos de robo.
El menor debió ser hospitalizado como consecuencia de la andanada de puntapiés y trompadas que padeció.
Lunes, 31 de octubre de 2016
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