El estanciero Atilio Güenaga fue víctima de un violento asalto en la estancia “Flor María”. Lo mataron a golpes y también agredieron a su esposa. El hecho ocurrió en agosto de 2011. Los delincuentes se llevaron un armario que contenía $150.000. Por el homicidio es juzgado un joven que sería un empleado.

Comenzó el juicio por el asesinato del tío del Juancito Güenaga
Empezó el juicio por el asesinato del estanciero Atilio Güenaga ocurrido en agosto de 2011 en la localidad de Curuzú Cuatiá. El acusado es un hombre que se desempeñaría como empleado del establecimiento ganadero.


El debate se realiza en el Tribunal Oral y Penal de Mercedes. El anciano, de 80 años, fue asesinado a golpes en la cabeza y su esposa fue hallada herida con su rostro fracturado, en una estancia distante 70 kilómetros de la ciudad de Curuzú Cuatiá, y, con las pruebas que hasta ahora recolectaron, los investigadores intentan establecer si se trató de un hecho delictivo o si por el contrario tiene otros ribetes.


Según los datos oficiales, el drama fue descubierto por un familiar de la pareja que llegó hasta la estancia “Flor de María”, ubicada en la Cuarta Sección Paraje Avalos, donde habitaban Ramón Atilio Güenaga (80), tío de Juancito Güenaga, acordeonista, autor y compositor chamamecero, también nacido y criado en la localidad de Curuzú Cuatiá, y su esposa, Isabel Farinón (67).


Según el testigo, al arribar al lugar, notó que una de las ventanas de la vivienda estaba violentada, por lo que se dirigió hacia las habitaciones donde halló en el interior al anciano ya sin vida y a la mujer con su rostro ensangrentado, semiinconsciente.


El pariente de las víctimas llamó a la Policía para informar sobre lo sucedido. El cuerpo de Güenaga fue trasladado a la morgue judicial y por orden del juez en turno se le practicó una autopsia que reveló que presentaba un traumatismo craneoencefálico, que fue lo que determinó su muerte.


Evidentemente el hombre habría sido atacado en la cabeza con un elemento contundente, luego de recibir algunos golpes.


Fuentes policiales indicaron que en el lugar donde fueron hallados los ancianos también secuestraron un palo, tipo garrote, con el que se cree que habrían dado muerte a Güenaga, aunque lo que se trata de establecer es cómo sucedieron los hechos. Todo parecería indicar que se trató de un robo violento, con un final trágico para uno de los dueños de casa.


Se tomó declaración testimonial a todos los testigos que se encontraban en el lugar de los hechos. Pasó algún tiempo y el caso llegó a tener tres detenidos pero por falta de pruebas de a poco recuperando su libertad hasta no quedar ningún detenido. Hace un más de un año se había ordenado la detención nuevamente de uno de los empleados de la Estancia Flor de María y desde ese entonces quedó privado de su libertad y sigue siendo el único por la causa.


De acuerdo a los datos recabados se pudo saber que el asalto fue cometido por al menos dos personas que no pudieron abrir el armario de algarrobo donde estaba la caja fuerte con el dinero y decidieron llevárselo. Dentro del mueble había guardado 150 mil pesos que el anciano, Atilio Güenaga, habría cobrado por la venta de ganado.


El objeto fue hallado a días del homicidio en un campo de las inmediaciones. Ya no contenía el dinero.


Miércoles, 26 de agosto de 2015