JUICIO POR EL ASESINATO DE UN MENOR
Condenaron a un policía por un caso de gatillo fácil
Julio Maldonado recibió la pena de 5 años de prisión por el delito de homicidio culposo. Como ya cumplió parte de la condena podría quedar en libertad en los próximos meses.
El fiscal Carlos Lértora pidió su absolución por falta de pruebas. La querella había solicitado la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio calificado por alevosía.
Gran indignación e impotencia generó en los familiares de Exequiel Riquelme al escuchar el fallo del Tribunal Oral Penal Nº 1 que condenó a cinco años de prisión a un policía por el homicido del menor de 14 años en un hecho ocurrido en septiembre de 2010 en el barrio Pío X. Antes de conocerse el veredicto, el efectivo Julio Maldonado manifestó ser inocente y que desconocía quien había efectuado el disparo que le quitó la vida al chico. Maldonado fue hallado culpable del delito de homicidio culposo y recibió una pena de 5 años de prisión. El policía permanece detenido desde que ocurrió el crimen. Es por eso que en pocos meses podría quedar en libertad, si la Justicia lo dispone.
Autoridades El tribunal estuvo compuesto por los jueces Ricardo Carbajal, Rafael Escarlón, y María Martínez Spalla. En representación del Ministerio Público se desempeña el doctor Carlos Lértora. En la querella actuó el abogado Facundo Esquivel. En tanto que Maldonado fue defendido por el abogado Juan Francisco Brambilla.
La causa El homicidio ocurrió el lunes 6 de septiembre de 2010. En la intersección de las calles Las Heras y Gobernador Velazco los policías advirtieron la actitud sospechosa del menor, que al notar la presencia policial corrió hacia su casa. Al operativo se sumaron otros móviles y se inició una persecución. Al verse acorralado, Exequiel Riquelme ingresó a la casa de un vecino ubicada en pasaje Las Flores, entre Chubut y Santa Cruz, a pocos metros de su domicilio. El chico fue detenido en el pasillo de la vivienda y herido de un disparo en el cuello. Los perdigones le provocaron una grave lesión y comenzó a desangrarse. Fue trasladado en un patrullero al Hospital Escuela, donde le extrajeron de la zona del cuello 13 perdigones de goma que fueron disparados por una escopeta calibre 12,60 tipo Itaka. Riquelme fue derivado al Hospital “Juan Pablo II”, donde alrededor de las 23 dejó de existir.
Martes, 26 de agosto de 2014
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