La esposa del joven que sufrió quemaduras en una comisaría de Tabay, Claudia Espínola, sostuvo que hubo "negligencia" por parte de los efectivos policiales y pidió cambios en la dependencia. Lucas Aguirre (23) fue detenido el pasado sábado luego protagonizar una riña en un local bailable de la zona.

Fue trasladado a la comisaría y horas después se despertó con las llamas en su cuerpo. Pidió ayuda de forma desesperada y los uniformados llegaron tiempo después para socorrerlo.


En comunicación con Radio Sudamericana Claudia Espínola, pareja de Lucas Aguirre (23) el joven que resultó con graves heridas luego de incendiarse en una comisaría de Tabay, pidió que se realicen cambios en la dependencia policial ya que acusó de “negligentes” a los efectivos que se encontraban de guardia el pasado sábado por la noche cuando su esposo fue quemado.

Alrededor de la 4 de la madrugada del sábado, Aguirre -víctima-, salía de un evento realizado en el Club Social de la mencionada localidad y fue interceptado por un grupo de policías. Según denuncia la mujer, pese a que circulaba solo, los uniformados decidieron demorarlo y luego trasladarlo a la comisaría por su estado de ebriedad

Aguirre no encontraba explicación a lo que estaba ocurriendo y aparentemente, desde el momento de su detención y hasta la comisaría, forcejeó y discutió con los funcionarios policiales. “Mi marido estaba tomado, pero él se fue a la comisaría y se acostó a dormir. Es la primera vez que lo llevan preso”, indicó.

Según Espínola, su esposo estaba acostado y de golpe comenzó a sentir que se quemaba. Se despertó y vio mucho humo en su cuerpo. “Junto al compañero de celda comenzaron gritar para que los ayuden y los policías nunca llegaron. Tiempo después lo asistieron, pero mi marido estaba todo quemado”, dijo la mujer.

“Si bien mi marido no entendía lo que pasaba se dio cuenta que su compañero de celda estaba fumando, creemos que por ahí vino el fuego”. Por la gravedad de las lesiones, en primera instancia el joven de 23 años fue derivado al hospital de Tabay y luego trasladado a un nosocomio de la localidad Saladas. Afortunadamente ya se encuentra fuera de peligro.

“Pedimos que haya cambios en esa comisaría porque la situación ya no da para más, está cada vez peor”, finalizó la mujer, madre de una pequeña de 4 meses que tiene junto con la víctima.

Miércoles, 20 de agosto de 2014