SE DEFENDIÓ CON UN PALO DE HOCKEY
Intentaron secuestrar a una chica en una parada de colectivo en Laguna Seca
Una adolescente de 17 años, que esperaba el colectivo 110 para venir a una clase de Educación Física, fue abordada por un hombre que a la fuerza intentó hacerla ingresar a un auto. Ocurrió en la esquina de las calles Darragueira y Córcega, entre Cazadores y Belgrano, en el Barrio Laguna Seca, casi en el límite con Güemes. El hecho fue denunciado por su madre, Lorena Maidana, quien precisó que el hecho ocurrió a las 16,20 de ayer. El auto era un Peugeot 206 o 207 de color blanco.
Lorena Maidana, madre de una adolescente de 17 años, denunció a través de los micrófonos de Radio Dos que su a su hija intentaron secuestrarla mientras esperaba el colectivo para ir a una clase de Educación Física. El hecho se registró ayer a las 16.20 en la intersección de las calles Darragueira y Córcega -en la zona donde se encuentra el boliche Glamour- en el límite de los barrios Güemes y Laguna Seca. La chica concurre a la Escuela Normal, y por la tarde va a Educación Física al Polideportivo. “Mientras esperaba el colectivo se le acercó un Peugeot 206 o 207, de color blanco. Del auto bajó un hombre, se le prende desde atrás y la sostiene con dos brazos”, contó la madre, que agregó que la jovencita se defendió con un palo de hockey que llevaba para la práctica de ese deporte. “Cuando pudo zafar, corrió desesperada llorando hasta mi casa –que queda a una cuadra- a contarme lo que pasó. Fui a la Comisaría 8va a hacer la exposición para que los patrulleros hagan algo. Vivimos situaciones extremas, y gracias a Dios a mi hija no la pudieron levantar”, dijo y agregó que “eran las 16.20 de la tarde. Hoy está asustada… no quiso ir al colegio, tiene miedo y ahora tenemos que llevarla y traerla”. “Tengo tres hijos, dos chicas de 15 y 17 años y otro nene. Van en distintos colegios, uno no puede llevarlos de un lugar a otro, hice la denuncia y van a ver que hacen”, señalo la madre. El auto de color blanco era sin vidrios polarizados, y el conductor estaba solo al momento de intentar el rapto: “en el lugar, en la parada no había nadie pero no sé si en otra parte había otras personas para que la puedan ayudar. Ella no vio, no sé si había o no vio, lo único que hizo cuando pasó eso fue dar patadas para evitar cualquier cosa”. “Es una chica alta, grande. Y con los gritos, con el forcejeo alguien tuvo que oír algo. Es lamentable, quería que se sepa para que no quede en la comisaría y no se haga nada para que la gente cuide sus hijos y que no vuelva a suceder. Es un depravado, un degenerado, yo le decía a los policías si pasaba eso en la zona y ellos me dijeron que nunca se denunció, nunca se hizo una exposición en esa zona por un caso similar”, relató.
Martes, 6 de agosto de 2013
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