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Gastón Pauls confesó cuál fue el peor momento de su vida
El actor reveló el periodo más complejo que atravesó por las adicciones.
Hace tiempo que Gastón Pauls activó una revelación de su pasado tormentoso, de ese infierno en el que cayó por las adicciones a las drogas. Tal grado de concientización que se lanzó a realizar un programa en Crónica sobre esta temática, ahora sumó una confesión de un periodo muy álgido de su vida.
El actor no oculta su problemática, al contrario tomó una postura de transmisión a la sociedad de los riesgos, los peligros y las secuelas nocivas de las drogas. Una manera de exorcizarse y tratar de comunicar al mundo que los estupefacientes son un calvario.
En esa sintonía con poner en palabras todo lo que experimentó, el ex de Agustina Cherri dialogó con Migue Granados en su podcast La cruda y abordó una etapa muy turbulenta, de hecho describió cómo fue el origen de su contacto con las drogas.
Respecto a la primera vez que consumió, Gastón contó: "El porro lo probé a los 15 y vi que estaban fumando y dije, si digo que no ahora que estamos todos borrachos y que yo soy parte de ese equipo de gente cool, voy a quedar mal”.
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Gastón Pauls reveló un secreto desconocido de Nueve Reinas: “No iba a estar Darin. La iba a hacer…” Asimismo, narró que eso le permitió romper con un comportamiento de su personalidad: “Cuando apareció lo primero que hice además de toser y guardar el humo, era reírme mucho, algo que me costaba mucho hacer, porque esa expresión me daba vergüenza hacer. Cuando descubrí el porro, descubrí la risa".
Todo esa inmersión en los estupefacientes lo llevó a tomar decisiones muy peligrosas, así Gastón explicó: "El porro me mostró la diversión, incluso manejé fumado a los 18 años, cuando me la quise poner con el Monumento a los españoles y tenía teorías que tenían que ver con la doble vida, para mí era algo como entrar a un portal".
Hasta que se refirió a la cocaína, que lo introdujo en otro grado de dificultad mayor. "La primera vez que tomé merca en el año 1989, yo estaba en pedo y loco. Yo me puse a saltar en la Avenida Santa Fe por las franjas blancas de la línea peatonal, porque si tocaba las verdes me caía de un pozo y yo decía, no me pueden tocar los autos", confesó.
Y en cuanto a las secuelas profundas de esa droga, Pauls admitió: “Es el mismísimo infierno. Sentirse Superman no es gratis, el ticket siempre llega en algún momento… Un ticket pesado y muy difícil de pagar".
Viernes, 5 de agosto de 2022
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