HISTORIA DE PANDEMIA
Sacerdote goyano cuenta su experiencia en Mozambique
El sacerdote goyano Marcelo Fernández, cuenta su experiencia vocacional, como Misionero Redentorista en Mozambique, África. El presbítero, en diálogo con Radio Ciudad, cuenta desde la experiencia de vida asumida por la consagración vocacional y los distintos caminos que recorrió desde la función pastoral. El sacerdote contó: “Me crie en una familia creyente, de gran devoción católica, en un ambiente de fe.
“En Mozambique aprendí con los lugareños a encontrar una nueva forma de celebrar a la vida”, aseveró el Sacerdote oriundo de Goya Marcelo Fernández.
Particularmente crecí en Parroquia La Rotonda; en mi horizonte o sueño nunca estuvo esto de ser sacerdote o misionero, es un camino que se fue dando, desde el llamado de Dios en mi vida, mostrando esos caminos, fue surgiendo hasta descubrir mi vocación, el camino de la fe. Compartir la experiencia en La Rotonda, Diócesis de Goya; en el Seminario surge la Visión de la Vida Misionera, fuera del país. Nuestra Congregación desde el 2022 apostó a la Vida Misionera en Mozambique y ante la consulta, di mi disponibilidad y en el 2004 me enviaron a África”. Ante la pregunta sobre el significado, el símbolo y la misión de Los Redentoristas en Goya en la Parroquia La Rotonda, Marcelo emocionado sintetizó: “Es una comunidad cristiana, es nuestra casa, yo crecí ahí en la parroquia, los mejores años de mi vida, los compartidos con mis padres, los jóvenes, mis amigos, celebrar estos momentos. Cuando Dios me llamó para este camino, fue muy importante el acompañamiento de los sacerdotes Misioneros Redentoristas para este recorrido”. Sobre su sentido o llamado vocacional, el misionero contó en la radio: “No fue una cuestión automática. En mi adolescencia, en un encuentro de las Hermanas (Monjas) que desarrollaron una semana vocacional, de oración fuerte, sentí que me llamaba pero entendí que no era el momento. Eso a los 15 años, y al finalizar la secundaria, cerca de los 17 volví a sentir de manera más profunda y ahí tuve un camino de discernimiento que se prolongó tres años ante de ingresar al Seminario”.
EXPERIENCIA MISIONERA EN MOZAMBIQUE Ante la consulta de lo visto y vivido en África, Marcelo Fernández expresó: “Cuando llegué en 2004 a Mozambique fui destinado a una parroquia rural, a 600 Kilómetros de la Capital Maputo, viví 5 años en ese lugar. El paisaje y tipo de vida, la gente, la diferencia cultural que me invitaba a nacer de nuevo, a aprender todo, a hablar en su lengua, o dialecto, más allá del oficial que es el portugués. Incorporar lo básico de la lengua nativa con un mes de aprendizaje con un profesor para hablar y celebrar la Misa, básicamente aprendí a rezar y celebrar la liturgia en su lengua. En la primera celebración en su lengua nativa uno siente la emoción y pide permiso por los errores que puede uno cometer, pero con todo el respeto”. “En Mozambique existen muchos hogares de chicos huérfanos, algunos que albergan a niños sin padres, por causa del SIDA. Estos hogares cuentan con el cuidado y protección de Congregaciones de las Hermanas Religiosas”, señaló el Misionero. Sobre la cultura de los pueblos de Mozambique y la celebración manifestó: “Las celebraciones están cargadas de cantos y danzas, no tienen tiempo, puede durar tres o cuatro horas. Están nutridas de estos elementos, lleva tiempo. Uno debe habituarse y cuesta cuando se vuelve al país, porque nuestras Misas son cortas y menos dinámicas. El don es propio de esta parte, los talentos para el canto y el baile; uno llega a las comunidades, no importa la distancia, cantan y bailan, una forma de celebrar la Vida, más allá de la pobreza, de la economía, muchas familias, sin las necesidades básicas satisfechas de igual forma tienen una disposición a celebrar, a cantar y a bailar la Vida. Con una economía de subsistencia, incluida la agricultura, la falta de empleo es un denominador común también en África”, agregó.
AYUDA Sobre la manera de enviar ayuda a los Misioneros en su trabajo y función, el sacerdote goyano explicó en Radio Ciudad: “La mejor manera de ayudar es la oración, acompañar en el trabajo para que crezcan las comunidades. Nosotros intentamos ayudar en aquello más elemental, que consigan agua potable, acceso a la salud, mejor nutridos los niños, algún apoyo para la educación básica. Contamos con un Programa de Padrinazgo, hoy dificultado por la crisis del Covid 19, esto nos desafía a apoyar a los chicos en los diversos proyectos, pero especialmente en el sustento básico, para lo cual se trabaja articuladamente con otras instituciones”.
PÁGINA DE LOS MISIONEROS Sobre cómo descubrir más sobre el trabajo y la función pastoral, el sacerdote manifestó: “Misioneros Redentoristas en Argentina, ahí encontrarán los links y los proyectos que tenemos. Yo estoy acompañando desde el Seminario Redentorista para la formación de los futuros misioneros de esta tierra, es un proceso y hay que acompañarlos, por eso uno puede ingresar a la página y ver el proyecto y ver donde se sienten más cómodos para colaborar. Es un desafío recibirlo a los jóvenes para esta formación, algunos son profesionales y a otros tratamos de ayudarlos a forjar un camino de Fe, un Camino de Vida, de Experiencia”. En su despedida, dejando el saludo a toda la comunidad de Goya y el agradecimiento a Radio Ciudad, manifestó: “Invitar a los jóvenes que no dejen de soñar, cuando Dios los llame no se cierren pues tiene un propósito para cada uno de ellos”. Finalmente dejó la bendición, “confiando en el Nombre de Jesús, Señor del Universo, de la Vida, por Intercesión de María nuestra Madre, en el día del Santo Patrono Carlos Lwanga y los Santos Mártires, que han testimoniado la fe, el pedido de la Bendición a todo el Pueblo goyano”.
Jueves, 4 de junio de 2020
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