Carolina Salas entrevistó al Médico Nicolás Chamorro, quien desempeña su profesión en la ciudad de Buenos Aires. Sobre la experiencia en este tiempo del Coronavirus, Nicolás contó que “la situación en Buenos Aires es complicada, dentro de la Pandemia, pues concentra la mayor cantidad de casos entre la Capital Federal y el AMBA. Estamos hablando de alrededor de 5 millones de personas altamente expuestas en Buenos Aires”.

Sobre las cuestiones sanitarias, el tratamiento ante el diagnóstico de esta enfermedad, señaló: “Existen personas asintomáticas, oligosintomática, pocos síntomas, con síntomas leves y los más graves en relación a la sintomatología. Lo más frecuente es la presentación con un cuadro similar al resfriado, tos, fiebre, con temperatura superior a 38 grados, aunque se pone como parámetro los 37, 5 grados. Esto son los más frecuentes, pero suelen surgir algunos relacionados como cansancio, alteraciones, y otros con dificultad para respirar y eventualmente aquellos más graves -la minoría visto hasta ahora-, con insuficiencia respiratoria. Esos son los rasgos más frecuentes que observamos”, indicó.
Sobre su experiencia de atención, el profesional comentó: “Parece lejano, pero el primero atendido fue el pasado 3 de marzo y desde allí comenzaron a cambiarse los criterios de diagnóstico desde esa fecha hasta la actualidad. Esto nos lleva a sospechar casos en la ciudad en personas con temperatura superior a 37,5 grados, por la circulación viral en Buenos Aires”.

AISLAMIENTO
Sobre la situación de la cuarentena, acotó: “Es la mejor herramienta que tenemos para enfrentar, para defendernos y afrontar la pandemia. Los principales beneficios: la disminución de la cantidad de contagio y en la velocidad de la propagación de la enfermedad, permitiendo preparar al sistema de salud para recibir a los pacientes, porque una gran mayoría necesitará esta atención hospitalaria. Así el sistema podrá amortiguar el impacto y ayudará a preparar el sistema operativo y recursos humanos. La desventaja es la disminución del resto de las consultas, cirugía urgente diferidas, las cirugías programadas se han postergado en un lapso de mayor a los tres meses, los turnos reprogramados, y con todo favorable se dará para los meses de septiembre u octubre”.
En relación a otras cuestiones que plantea este tiempo de coronavirus, Chamorro señaló que “a nivel psicosocial el encierro provoca mayor grado de ansiedad, de estrés, y en lo económico la posibilidad de trabajar, de generar sus ingresos, más allá de los parches, de la IFE, es muy bajo como paliativo. Esto podría enumerarse como consecuencia de la pandemia y de este aislamiento social”.
FUENTE PRIMERA HORA

Miércoles, 3 de junio de 2020