Como todos los años los centros de salud de la provincia aseguran que habrá una normal prestación de los servicios asistenciales durante las fiestas y, de manera preventiva, algunos hospitales refuerzan las guardias de emergencia.

En el caso del Escuela, éste se encuentra al límite de su capacidad de camas, tras un fin de semana de intenso trabajo a causa del ingreso de unas 25 personas accidentadas. “Este lunes el hospital amaneció completo entre los ingresos por accidentes, tres intentos de suicidio y dos personas heridas con arma de fuego. Siempre trabajamos de esta manera. Tenemos un poco más de cien camas las que prácticamente de manera habitual están ocupadas. Seguramente por la tarde vamos a empezar a dar algunas altas, para dejar una reserva para lo que pueda venir el 24 por la noche y el 25”, expresó a El Litoral el director del centro de salud, Salvador González Nadal.
En esa misma línea, en el Hospital Escuela un plantel de profesionales reforzará la atención de la emergencia como si se tratase de un fin de semana. Al respecto González Nadal precisó que “quedarán tres emergentólogos, un traumatólogo de guardia activa, y apoyos activos en terapia intensiva, anestesia y clínica médica. Además, las residencias brindarán su contención con alrededor de 12 médicos, junto al equipo de radiólogos laboratoristas, camilleros y todo el personal de enfermería”.
Un sistema similar se preparó en el Hospital Vidal, y al respecto el director de dicho centro de salud, Horacio Sotelo indicó a El Litoral: “Desde hace años que en las fiestas activamos un protocolo de refuerzo del personal de la emergencia, tanto profesional como administrativo, y también de los diferentes servicios afines. Es decir, los profesionales del quirófano o terapia intensiva. Así que estamos preparados con todas directivas necesarias para que la atención funcione sin sobresaltos”.
Debido a que el Hospital Escuela concentra el mayor volumen de atenciones por accidentes de tránsito, la emergencia del Vidal está preparada para atender las lesiones que podrían ocasionarse por pirotécnica, intoxicaciones alcohólicas o diversas heridas. “Tenemos el equipo de emergencia listo para recibir este tipo de contingencias, pero eventualmente en los últimos años tuvimos menos lesiones por pirotecnia”, manifestó Sotelo.
En este sentido, debido a que la ordenanza reglamentada sobre la prohibición de pirotecnia de estruendo que tenga más de dos pulgadas, los nosocomios esperan tener una menor atención por casos de quemaduras pero los servicios se encuentra listos.
De hecho, el Hospital Pediátrico “Juan Pablo II” preparó también un sistema de guardia permanente y un equipo especializado en el servicio de Quemados. “Durante la Nochebuena estaremos de guardia como todo el año, y esperamos que se cumpla la prohibición de pirotecnia”, señaló a El Litoral la jefa del servicio de Quemados, Marta Vergara.
Para cerrar, el director de Gestión Hospitalaria e Instituciones de Salud, Alberto Arregín, dijo: “Todas las guardias están garantizadas. La organización siempre se da a criterio de cada hospital, es decir, cada Dirección de hospital se encarga de organizar y de reforzar los servicios para asegurar la atención durante las fiestas de fin de año”.
Incluso garantizaron el funcionamiento de las guardias en los Centros de Atención Primaria de la Salud. Así lo dijo, el coordinador de Caps de Capital, Cristian Sarquís que expuso: “Están garantizadas las guardias y articuladas con la Dirección de Emergencias Sanitarias (DES). En los Caps N° 3 (barrio 1.000 Viviendas), 4 (Laguna Seca), 5 (Doctor Montaña), 7 (Laguna Brava), 9 (barrio 17 de Agosto), 10 (Molina Punta), 11 ( F. J. de la Quintana), 12 (barrio Ponce) y 15 (barrio Pirayuí 550 Viviendas)”.



Martes, 24 de diciembre de 2019