Las previsiones del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) para el verano indican que podría experimentar temperaturas superiores a las normales para la estación que comienza el viernes 21. En cuanto a las precipitaciones, se prevé que estén por encima de la media en los próximos meses, especialmente si se desarrolla el fenómeno El Niño.

Restan 15 días para el inicio de la temporada estival, dejando atrás una primavera que, como adelantó este medio en su edición del 3 de octubre, se caracterizó por las abundantes lluvias y las jornadas calurosas.

TERMÓMETRO

Un informe trimestral elaborado por el SMN, al que pudo acceder EL LIBERTADOR, expresa que existen entre un 40 y un 50 por ciento de probabilidades de que el verano presente temperaturas superiores a las normales en la ciudad de Corrientes. De acuerdo a los datos climáticos promedio, la escala térmica para diciembre varía entre los 20° de mínima y 32° de máxima, para enero entre 21° y 33° y para febrero entre 21° y 32°.
PRECIPITACIONES

En lo que respecta a las precipitaciones, las previsiones indican que hay alrededor de 40 por ciento de posibilidades de que la cantidad de milímetros sea algo mayor a lo típico para esta época. Los datos climáticos promedio indican 157,7 mm de lluvia en diciembre, en enero de 167,3 mm y en febrero de 157,1 mm.
Vale la pena mencionar que el SMN no descarta que ocurran eventos de precipitación localmente más intensa que lo normal sobre el Norte de Argentina durante el transcurso de los próximos meses. En ese sentido, aclaran que la coincidencia en los pronósticos, sumado a la propia climatología y al posible desarrollo del fenómeno El Niño aumenta las chances en la frecuencia de estos eventos con sus respectivos impactos.

IMPREVISTOS

Es importante indicar que las previsiones climáticas expuestas se refieren a condiciones medias durante el período analizado y no contemplan singularidades de los eventos de escala intraestacional.
El SMN especifica que algunos de los fenómenos que pueden modificar las previsiones son: sistemas frontales, olas de calor o de frío, bloqueos atmosféricos u otros condicionantes del tiempo que producen aumento o disminución de la precipitación y la temperatura, todos ellos de corta duración.

Jueves, 6 de diciembre de 2018