El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, presidió el domingo 7 de octubre las fiestas patronales en honor de Nuestra Señora del Rosario, patrona de la ciudad. A las 11, monseñor Adolfo Canecin dio la bienvenida a los peregrinos que llegaron caminando desde zonas rurales y luego se llevó a cabo la tradicional procesión y la misa central, ante una multitud que se congrego frente al templo catedralicio.

El obispo Adolfo Canecin, centro su homilía, reflexionando sobre las Bodas de Cana, uno de los primeros milagros de Jesús, que el evangelista Juan llama “signos”, porque Jesús hizo para revelar el “amor del Padre”.

Al referirse al mes de la Biblia que concluyo animo a los fieles a leer la Palabra de Dios, recordando las palabras de San Gerónimo “quien ignora la Biblia ignora a Jesucristo y quien conoce la Biblia conoce a Jesucristo” por eso relaciono la fiesta mariana porque: “María nos remite a Jesús. La auténtica devoción mariana nos lleva a Jesucristo el Señor” dijo.

Más adelante, remarco que “lo que más anhela el corazón humano es la libertad, pero lamentablemente la mentira no nos hace libres”.

FALSOS IDOLOS

Denuncio luego “propuestas que nos quieren someter ante los falsos ídolos” dijo, por eso, aconsejo “vayamos a Jesucristo, que es la verdad, que trasciende más allá de la opinión particular de cada uno de nosotros”.

Dijo luego que “es bueno buscar consenso, pero es bueno recordar que el consenso no siempre es la verdad” en esa línea pidió a la feligresía que “busquemos juntos la verdad que está en el Hijo de Dios, que es el Hijo de María. Busquemos la verdad que es Jesucristo”.

Monseñor Adolfo Canecin puntualizo que “Jesucristo es la verdad sobre Dios, Él nos revela al verdadero Dios” e hizo propias las palabras de San Juan de la Cruz: “fuera de Jesucristo Dios no tiene otra palabra para dirigir a la humanidad”.

“Es bueno tener una autentica imagen, experiencia y conocimiento de Dios” porque, a veces “llamamos Dios a las obras de nuestras manos, al comer, al tener, al placer y a las nuevas tecnologías, que terminamos idolatrándolas y después nos esclavizan para la muerte” ejemplifico.

“Jesucristo nos revela siempre el rostro del verdadero Dios: ´quien me ve, ve al Padre´, solo en Jesucristo podemos conocer el verdadero Dios” puntualizo.

IDEOLOGIA DE GENERO

“A veces nos quieren confundir, tal vez con buena voluntad, pero terminamos adorando a quien no corresponde y nos esclavizan, atándonos el corazón, las manos y los pies y nos impiden caminar en la libertad de los Hijos de Dios” expreso.

“Jesucristo es la verdad sobre el hombre” por eso llamo “en particular en esta época” tener una “sana concepción antropológica de quien es el hombre, que es, de donde viene y a donde va, pero por sobre todas las cosas, para que está”.

Destaco en ese sentido que “a lo largo de toda la historia siempre hubo diversas interpretaciones y concepciones, algunas posturas ideológicas y, hoy, nuestra época no escapa a estas posturas”.

Porque “cuando se tiene una concepción errónea de la vida, desde lo religioso y científico, se quiere quitar la vida desde el seno materno” denuncio.

“Quieren construir la identidad desde ideologías, sin aceptar que se nos da la gracia de ser varón y de ser mujer, porque, tenemos una naturaleza humana que se nos dio” y alerto que se quiere “imponer, por fuertes grupos que invierten mucho dinero, la ideología de género”.

“Es importante que todos nos interioricemos, para informarnos de que se trata esta ideología de género y, de esa manera, tenemos que saber que actitud tener frente a ello” por eso “mis hermanos, descubramos en Jesús: ¿Quién soy?” aconsejo el Obispo.

Remarco que el magisterio de la Iglesia expresa: “el hombre es un misterio que solo se comprende y dilucida a la luz del misterio del Verbo encarnado, es decir, Jesucristo el Hijo de María”.

”Jesucristo nos revela el sentido de la vida humana. Tenemos que saber cuándo comienza, para que estamos y cuando termina abriéndose a la eternidad” subrayo.

“Jesucristo es la verdad sobre el tiempo, la historia, él nos enseña cuando comienza y donde termina la historia. La historia camina hacia la consumación, la plenitud, el cielo nuevo y la tierra nueva” reflexiono.

“A Dios no se les escapo la historia de las manos: El sigue llevando a su plenitud la historia” y agradeció luego a la Santísima Virgen por su “testamento” a Ella que no se “quiso apropiar sino que nos derivó e invitó a hacer todo lo que ´Él les diga´. ¡Gracias Madre!, por remitirnos a Jesús que es la verdad que nos hace libre: verdad sobre Dios, el hombre, la Iglesia y la historia” concluyo.-


Martes, 9 de octubre de 2018