RECOMENDACIONES ANTE LAS ALTAS TEMPERATURAS
La Municipalidad desarrolla charlas informativas en Saps sobre el cuidado de la salud en época estival
Mediante charlas en las salas de espera, agentes sanitarios de la Subsecretaría de Salud informan a los pacientes sobre los diversos cuidados a tener en cuenta en época de altas temperaturas. Golpes de calor, exposición solar y consumo de alimentos seguros son las temáticas abordadas en las Saps.
Conocé las recomendaciones para preservar tu salud. La Municipalidad desarrolla charlas informativas en Saps sobre el cuidado de la salud en época estival El Municipio capitalino, a través de la Subsecretaría de Salud, lleva adelante charlas informativas en los salones de espera de las Salas de Atención Primaria de la Salud (Saps) sobre diversos cuidados que se deben tener en cuenta durante la época estival. Entre las temáticas abordadas por los agentes sanitarios a los ocasionales pacientes, se encuentran la exposición solar, hidratación para evitar golpes de calor y el consumo de alimentos seguros. En consonancia con las líneas de acción del Ministerio de Salud de la Nación, la Subsecretaría de Salud Municipal -dependiente de la Secretaría de Desarrollo Comunitario-, informa a los pacientes de las Saps sobre diferentes temáticas relacionadas a la salud en temporada de altas temperaturas. En este sentido, los agentes recalcan sobre las acciones a realizar para prevenir golpes de calor, en especial en las embarazadas, los bebés y niños pequeños, las personas mayores de 65 años, y quienes padecen enfermedades crónicas, respiratorias o cardíacas, hipertensión arterial, obesidad y/o diabetes, que son los que pueden resultar más afectados. Para evitar los golpes de calor; los médicos recomiendan tomar abundante agua durante todo el día; reducir la actividad física; ingerir frutas y verduras y evitar comidas muy abundantes; evitar las bebidas alcohólicas o muy azucaradas; no exponerse al sol entre las 10 hs y las 16 hs; protegerse del sol usando un gorro o una sombrilla; permanecer en espacios ventilados. En el caso de los bebés, darles el pecho con mayor frecuencia; mojarles el cuerpo frecuentemente y si tienen más de 6 meses, darles agua fresca apta para el consumo. CUIDADOS FRENTE AL SOL Por otra parte, para prevenir quemaduras e insolaciones se recomienda evitar el sol directo entre las 10 hs de la mañana y las 16 hs de la tarde; observar la propia sombra: si es corta o no se ve, significa que es pleno mediodía, por ende hay que resguardarse del sol. Mantener a los niños menores de un año a la sombra, y nunca exponer a bebés menores de 6 meses al sol, ni siquiera con protector solar. Es recomendable también usar ropa clara, holgada y sombrero o gorra para proteger la piel y los ojos del sol. Siempre usar filtro solar en crema, con un factor de protección de 15 o más, reponiéndolo cada 2 horas. CONSUMO DE ALIMENTOS SEGUROS Por otra parte, a la hora de alimentarse se requieren unos cuidados especiales durante el verano; es importante preservar la higiene, cocinar y conservar adecuadamente los alimentos para evitar la proliferación de microorganismos que pueden producir diversas afecciones como intoxicaciones, enfermedades diarreicas o el Síndrome Urémico Hemolítico (SUH). Para poder prevenir estas enfermedades, es muy importante: lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón, especialmente antes de comer y de cocinar; después de ir al baño, cambiar los pañales o higienizar la cola de los niños; manipular alimentos crudos (carnes y verduras); trabajar la tierra y al volver de la calle. Asimismo, asegurarse de usar agua apta para el consumo para beber, hacer hielo, lavar alimentos, hacer infusiones, cocinar, lavarse los dientes y las manos. Lavar bien las frutas y verduras antes de consumirlas o cocinarlas. Otra recomendación tiene que ver con el consumo de alimentos seguros, como carnes rojas, aves y pescados de frigorífico o de origen conocido; leche líquida pasteurizada y leche en polvo diluida con agua potable. Separar los alimentos crudos de los cocidos y no utilizar los mismos utensilios. Por ejemplo, no cortar un pollo cocido en la misma tabla o con los mismos cubiertos con los que antes se lo cortó en crudo. Cocinar completamente los alimentos crudos. Las carnes deben cocinarse hasta que no estén rosadas en el centro, en especial la carne picada. Desinfectar todas las superficies y elementos utilizados para preparar alimentos crudos (carnes y verduras). Para desinfectar los muebles, cubiertos, tablas y trapos rejilla se puede usar agua con unas gotas de lavandina, y luego enjuagar bien. Consumir los alimentos recién cocinados. Cuando los alimentos cocidos se enfrían a la temperatura ambiente, los microbios empiezan a multiplicarse. Cuanto más tiempo pasa, mayor es el riesgo. Si no hay heladera, lo mejor es preparar la cantidad justa que se va a comer y no guardar sobras. Conservar la comida a temperaturas bien frías. En caso de tener que descongelar, hacerlo dentro de la heladera y nunca volver a congelar un alimento descongelado. Todas estas recomendaciones se dan reiteradamente mediante las charlas que desarrollan los agentes sanitarios en las Saps a fin de que quienes concurren tomen los recaudos necesarios para disfrutar de su salud durante esta época del año y preservar las de sus familias.
Miércoles, 17 de diciembre de 2014
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