DESPEDITE
Qué hacer para combatir la halitosis o cómo decirle chau al mal aliento
Malos hábitos de la higiene dental, problemas de salud referente a tu sistema digestivo o respiratorio y hasta problemas estomacales. Este tedioso asunto es una cuestión que no debe tomarse a la ligera, ya que el mal aliento o halitosis puede ser incómodo para ti y tu entorno.
Algunas causas La alimentación tiene un papel muy importante entre las causas del mal aliento. Básicamente, todos los alimentos que comés empiezan a descomponerse en la boca. Si consumís alimentos con olores fuertes (ajo o cebolla), el cepillado y el uso de hilo dental, incluso el enjuague bucal, simplemente cubrirán el olor temporalmente. Este no desaparecerá por completo hasta que los alimentos se digieran en su totalidad. En tanto, manzanas, zanahorias, peras, sandía o kiwi ayudan a combatir el mal aliento.
¿Por qué los malos hábitos causan mal aliento? Si no te cepillás los dientes, ni usás el hilo dental todos los días, las partículas de alimentos pueden permanecer en tu boca. Esto promueve el crecimiento bacteriano entre los dientes, alrededor de las encías y la lengua. El resultado de este proceso será un espeluznante aliento de recién levantado. No muy agradable para quienes te rodean…
Además, las bacterias que causan olor y las partículas de alimentos pueden generar mal aliento si las dentaduras no se limpian adecuadamente. Por ejemplo, fumar o masticar productos a base de tabaco son unas de las clásicas causas del mal aliento. A su vez, son productos que manchan los dientes y reducen la capacidad gustativa de la lengua y el paladar. Es por ello que los odontólogos en todo el mundo exhortan -a toda costa- a sus pacientes a evitar el tabaco o cigarro.
No es ninguna sorpresa decir que el tabaco es uno de los principales responsables del mal aliento. Ya que reduce el flujo de la saliva y favorece la sequedad bucal. Dejar de fumar no sólo será bueno para tu salud, sino también mejorará tu aliento.
Causas del mal aliento El mal aliento pueden ser un signo de advertencia de la enfermedad de las encías, que es causada por la acumulación de placa en los dientes. Las bacterias causan la formación de toxinas que irritan las encías. Otras causas dentales de mal aliento incluyen aparatos dentales mal ajustados, infecciones por levaduras de la boca y caries dentales (caries).
La condición médica de boca seca (también llamada xerostomía) también puede ser determinante. La saliva es necesaria para humedecer la boca, neutralizar los ácidos producidos por la placa y eliminar las células muertas que se acumulan en la lengua, las encías y las mejillas. Si no se eliminan, estas células se descomponen y pueden causar mal aliento. La boca seca puede ser un efecto secundario de varios medicamentos, problemas de las glándulas salivales o respiración continua por la boca.
Muchas otras enfermedades pueden causar halitosis, como infecciones del tracto respiratorio como neumonía o bronquitis, infecciones sinusales crónicas, gota nasal, diabetes, reflujo ácido crónico y también los problemas hepáticos o renales.
Recomendaciones para combatir el problema – Mantené una buena higiene bucal. Cepíllate los dientes (y la lengua) al menos dos veces al día con pasta dental con flúor para eliminar los restos de comida y la placa. También después de comer y no te olvides de la lengua. No olvides utilizar hilo dental.
– Visitá a tu dentista regularmente, al menos dos veces al año. Este profesional realizará un examen y una limpieza dental profesional. Así podrás detectar y tratar la enfermedad periodontal, la sequedad de boca u otros problemas que pueden ser la causa del mal aliento.
– Dejá de fumar y masticar productos a base de tabaco. Puedes pedirle ayuda a tu dentista sobre cómo dejar el hábito. A su vez, conocemos los riesgos tan fatales de mantener este hábito. No solo para nuestra salud bucal sino para nuestro bienestar en general e incluso de quienes nos rodean.
– Tomá mucha agua. Esto mantendrá tu boca húmeda. Masticar chicles o comer caramelos (preferiblemente sin azúcar), estimula la producción de saliva y ayudará a eliminar las partículas de alimentos y las bacterias.
– Mantené un registro de los alimentos que ingerís. Algunos pueden causarte mal aliento. Del mismo modo, hacé una lista de los medicamentos que tomás, algunas drogas pueden desempeñar un papel en la creación de olores bucales.
– Agregá vegetales a tu dieta. Consumir hierbas aromáticas como el eucalipto, el romero, el perejil, la menta y la albahaca ayuda a eliminar todos los efectos que provocan el mal aliento. Además de ello, estas plantas son excelentes para acelerar tu metabolismo y hacer que tus comidas sean más ligeras. Podés optar, además, por empezar a incluirlas en tu recetas diarias; beneficiarán tu salud y tu aliento.
Todos detestamos oler un mal aliento. Tomá conciencia del problema y atacalo.
Miércoles, 27 de mayo de 2020
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