SE CUMPLIERON DOS MESES SIN CLASES PRESENCIALES
Temen que el aislamiento fomente la deserción escolar
El viernes se cumplieron dos meses desde que las clases presenciales están suspendidas en todo el país. Todavía es prematuro para precisar los efectos educativos que tendrá, pero sí se puede afirmar que sin dudas ensanchará las diferencias entre los alumnos que disponen de las herramientas tecnológicas y los que no.
Esa es la principal inquietud de los ministros de Educación de todo el país: el posible incremento del nivel de deserción escolar por la pandemia. Así se desprende de la decisión, conocida en el ámbito de la primera asamblea virtual del Consejo Federal de Educación (CFE), de encarar un relevamiento y un análisis de la matrícula escolar previa y posterior a la suspensión de clases presenciales para diseñar estrategias que colaboren con la reducción del abandono escolar.
Será en ese marco que se realizará la Evaluación Nacional del Proceso de Continuidad Pedagógica que se pondrá en marcha a partir del 26 de mayo y cuyos resultados estarán en julio. Se realizará con una muestra de 5.000 escuelas, tanto públicas como privadas.
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, planteó que están evaluando un retorno a clases para el mes de agosto, en todos los niveles educativos, siempre y cuando la curva de contagios no se dispare.
El regreso a clases se daría por medio de un plan que integraría instancias de educación virtual desde las casas y otras presenciales en los establecimientos educativos. Se baraja la posibilidad de turnar los días de asistencia.
En este escenario explosivo, la vuelta a clases traería el problema adicional de la circulación y traslado en transporte público de millones de personas. A esto se le agrega, ante la imposibilidad de construir nueva infraestructura en corto tiempo, la necesidad de acondicionar los establecimientos educativos a lo largo y ancho del país atendiendo a condiciones de infraestructura e higiene dispares.
Desde el sector gremial alertaron el estado de los edificios escolares que la docencia viene denunciando. Muchos no cuentan con agua, gas o baños en buenas condiciones. En Corrientes, la compra de elementos de higiene está a cargo de las cooperadoras escolares, donde el estudiantado puede pagar la cuota social.
Y por otro lado se analizó la brecha educativa. La desigualdad en el acceso a la información y a la educación ha quedado expuesta en toda su dimensión bajo la pandemia.
Expusieron que esa brecha educativa se genera no sólo por la cuestión digital, sino también por las condiciones socioculturales que se dan en cada hogar, que hacen a cómo los padres pueden acompañar (o no) a sus hijos en los aprendizajes.
Lunes, 18 de mayo de 2020
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