SE MANTIENE POR DEBAJO DEL METRO
Prevén que la bajante del río Paraná persista hasta la primavera
El Paraná se mantiene a una altura que no supera el metro y las perspectivas continúan siendo desfavorables. Hace un mes, el río apenas repuntó para volver a caer en una de las marcas históricas más bajas de los últimos 50 años.
Así, el 12 de abril el Paraná se encontraba a 1,21 metros y ayer, a 0,90. Desde el Instituto Nacional del Agua (INA) advierten que para los próximos días el río se mantendría dentro de los márgenes de las últimas jornadas.
Al mismo tiempo, aclararon: “Las condiciones que determinan la bajante en curso persisten en las cuencas que aportan al caudal en el río Paraná en territorio argentino. La futura evolución de los niveles en este tramo del río dependerá fuertemente de la distribución espacial y montos de las lluvias. La tendencia climática sigue siendo desfavorable”.
Mientras tanto, la costa correntina presenta un paisaje particular; con playas más amplias, cardúmenes que se amontonan ante la falta de agua y grandes bancos de arena.
Si bien en otras oportunidades el panorama fue similar -aunque no tan acentuado- la particularidad de la situación actual es que se mantiene desde hace varios meses -comenzó a mediados del año pasado- y los niveles son los más bajos desde hace décadas.
Investigadores del INA reconocieron que el escenario de la bajante se puede profundizar y que no hay perspectivas de un repunte significativo en las lluvias en el mediano plazo. También se desmitificó el rol de las represas brasileñas.
Señalaron que es posible que el río se repliegue todavía más si no se recupera el régimen de lluvias en la alta cuenca del río, que es la que aporta el mayor caudal al tramo medio del Paraná que comienza a partir del eje Corrientes Resistencia.
Reconocieron -además- que no hay una indicación climática clara que permita proyectar un cambio en el marco climático e hídrico. “Es un escenario persistente y no sabemos cuándo va a terminar. Hasta el 31 de julio continúa la incertidumbre sobre las lluvias y una coyuntura predominante de sequía”, señaló el investigador Juan Borus.
En ese mismo sentido se manifestó el climatólogo Eduardo Sierra, quien estimó que habría que esperar hasta la reactivación de las lluvias, bien entrada la primavera, para que los niveles del río comiencen a repuntar.
El informe, que fue realizado por el especialista para el Gobierno de Corrientes, indica que, como es normal en esa época del año, durante lo que queda del otoño y el invierno próximo las precipitaciones se concentrarán sobre el sur del Brasil y el litoral fluvial argentino, o sea la cuenca baja del Paraná y la del Uruguay, y se reducirán sobre la alta cuenca del Paraná (centro este del Brasil) y la del Paraguay.
Este proceso dará buenas condiciones locales en la provincia de Corrientes, pero no permitirá la recuperación del nivel del Paraná. El río Uruguay podría recuperarse algo más rápido, pero de todas maneras se atravesará la época menos lluviosa del año, por lo que es difícil que esto se produzca en forma rápida.
Durante la primavera y la primera parte del verano las precipitaciones se reactivarán gradualmente, siguiendo su curva estacional.
Esta evolución continuará dando buenas condiciones locales en Corrientes y provocará la gradual recuperación del nivel de los ríos.
Se aclara que estas perspectivas, que apuntan a una evolución dentro del rango normal, podrían verse modificadas en caso del desarrollo de un episodio de “La Niña”, que algunas fuentes señalan como posible.
Lunes, 11 de mayo de 2020
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