SEXO E INTIMIDAD DURANTE LA CUARENTENA
¿Cómo afecta en las parejas y cómo convertirlo en algo sano?
El confinamiento obligatorio por la pandemia de coronavirus, cambio el modo de vida de todas las personas. La mezcla de incertidumbre que provoca la situación más la gestión emocional se tornan más complicadas cuando no podemos salir de casa y sobre todo en aquellas parejas que conviven.
La situación que estamos viviendo puede afectar a las parejas tanto de forma negativa como positiva. Cuando las parejas disponen de más tiempo compartido, sucede que se agudizan las posturas de cada uno. Si la relación es sana, con buena comunicación, este tiempo puede convertirse en un gran crecimiento juntos, compartiendo actividades, charlas, momentos de ocio e intimidad. De lo contrario, si hay temas sin resolver o desencuentros, la conciencia del problema tiende a aumentar. Otro de los planteos que surgieron con la cuarentena, fue el tema sexual. Mientras algunas parejas jóvenes que llevan poco tiempo juntas incrementaron su actividad sexual con sus parejas, en otras el efecto fue inverso. Según el sexólogo Patricio Gómez Di Leva, con el tiempo se van perdiendo los espacios de intimidad y disminuye la actividad sexual.
“En tiempos normales, lo que suele ocurrir es la falta de tiempo, es decir, durante la rutina suele ocurrir que cada uno deriva su tiempo en otras actividades; amigos, médicos, deporte, trabajo. El espacio de intimidad personal es muy grande y el compartido poco, dejando así poco tiempo o ganas para estar con su pareja”.
Sin embargo, durante la cuarentena ocurre al revés: hay mucho tiempo y espacios compartidos y poco de intimidad personal. “Si a esto le sumamos las crisis y peleas, genera que uno pierda las ganas de compartir y tener relaciones con su pareja. En estos momentos hay que trabajar los espacios de cada uno, ya sea de trabajo o de ocio para que esto no ocurra”, comentó el especialista.
Lo que corresponde para llevar una relación sana:
Potencia vuestra intimidad: siestas juntas, caricias, comidas relajadas, recuerdos compartidos. Aprovecha el tiempo para amar y para disfrutar de la otra persona. Mantén la calma en los conflictos. Intenta ser flexible. Eso no significa ceder ante cualquier planteamiento sino aceptar la opinión del otro. Escucha de un modo activo, repitiendo lo que has entendido para no llegar a malas interpretaciones Negocia para llegar a un consenso razonable, donde una vez cede uno y en la siguiente el otro.
Lo que hay que evitar:
Olvidarte de ti y no dedicarte tiempo. Compartir tiempo juntos es estupendo, pero busca tu espacio y tus actividades gratificantes. Compartir 24/7 con tu compañero de vida puede ahogarte. Querer tiempo para ti solo/a, no significa que le quieras menos. Es cuidarte para dar la mejor versión de ti mismo/a. Frustrarse o desanimarte si surge alguna discusión. El inconveniente puede surgir en cómo afrontas los imprevistos, no en los imprevistos en sí. Muestra tus sentimientos y opiniones con reproches. Es mejor que lo hagas de la forma que te gustaría que te los expusieron a ti.
Jueves, 9 de abril de 2020
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