CONTINÚA LA RONDA DE TESTIGOS EN EL TOP 1
Muerte del penitenciario: Sigue sorprendiendo la frialdad de la viuda en sus testimonios
“La frialdad de sus actos en todo el juicio es un dato que no es relevante en lo procesal, pero que deja en claro una personalidad de alta peligrosidad que asombra”, dijo el doctor Hermindo González al referirse a Lorena Encinas, la viuda del penitenciario Gabriel Tichiello, asesinado en julio de 2018. Hoy continúan las testimoniales y el abogado querellante anticipó una clave: la de Romina, hermana de la víctima: “dejará al descubierto las maniobras que realizaron las coautoras para ocultar el hecho”
4 de Diciembre, 2019 lorena encinas en juicio.jpg “La audiencia testimonial contará hoy con uno trascendencia: el de Romina, la hermana de Gabriel. Además se espera que declaren Castillo y Villar que aportarán datos importantes en relación a los hechos que rodearon a los momentos posteriores al crimen”, expresó Hermindo González.
Respecto a lo que podría aportar Romina, dijo que “es importante porque dejará al descubierto las maniobras de ocultamiento que intentaron hacer las autoras del hecho, sobre todo Lorena Encinas, intentando desviar la investigación con maniobras que involucran al contexto familiar”
González se refirió a las actitudes de Encinas: “a todos nos sorprendió y sorprende su frialdad. Nos llamó la atención de cómo escuchaba las pruebas en su contra y la frialdad absoluta de cuando se le imputaba algo concreto. Son gestos simbólicos que aportan ante una resolución sobre su culpabilidad”
“No surge con toda claridad quien fue la ideóloga, pero si queda claro que ambas fueron coautoras de todo el ensañamiento y las estrategias para esconder el crimen”, agregó.
“Ninguna dudas que vamos a solicitar perpetua para ambas”, insistió.
El abogado dejó otros datos espeluznantes del crimen: “después de dejar abandonado el cuerpo de Gabriel y despojarse de elementos de prueba, Encinas volvió al domicilio de su suegra lamentándose de su ausencia y empezó a coordinar un mecanismo de búsqueda, y fue ella la que organizó todo el funeral y hasta se tomó el recaudo de quienes podían acercarse al féretro y quiénes no. Son datos que no son relevantes en lo procesal dejan en claro una personalidad de alta peligrosidad que asombra”
El crimen El agente penitenciario de 32 años, asesinado, cumplió con su trabajo el 26 de julio de 2018. Al regresar, almorzó con su familia como todos los días. Fue a dormir la siesta. Ese momento fue aprovechado, según reza el expediente, para que Encina le pida a sus tres hijos que vayan a la plaza. Allí quedaron hasta las 19. En ese tiempo, ingresó al domicilio Jara, con quien subieron a la habitación matrimonial y una de ellas con un palo golpeó dos veces la cabeza de Tichellio ocasionando su muerte. Para ocultar evidencias, incendiaron el colchón, ya que habían quedado manchas de sangre. Ocultaron el cadáver en el baño. Por ello, cuando los chicos regresaron tenían prohibido ingresar porque había “un alacrán”. Cerca de las 23:30, vecinos escucharon el motor de la camioneta. Allí estaba el cuerpo de Tichellio.
Jueves, 5 de diciembre de 2019
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