El Juzgado de Instrucción Nº 2 determinó ayer la “nulidad de la declaración de imputados” a Sergio Salazar y Jorgelina Romero, padre y madre de Tamara Salazar, por los disturbios generados el día del juicio por el femicidio de su hija. Ambos habían sido citados por la Justicia la semana pasada a raíz de este incidente, lo que provocó que las organizaciones de mujeres dieran una conferencia de prensa para pedir la revisión de esta situación.

“No tenía sentido la denuncia, así que nosotros estábamos esperando que nos absuelvan”, dijo ayer Romero a El Litoral, quien se encontraba participando en la movilización por el Día de la No Violencia contra la Mujer (ver página 6).



En ese sentido, destacó que “fue todo gracias al apoyo de las mujeres y de las organizaciones”, y que esto “nos da impulso para seguir pidiendo que se reabra el juicio”.
El movimiento feminista siguió de cerca este caso, al igual que con los otros femicidios ocurridos en la provincia, y con este apoyo se contribuyó a mantener en agenda el pedido de justicia por Tamara.
Vale recordar que la Corte Provincial declaró, en junio de este año, la nulidad de la sentencia del TOP Nº 1, que absolvió por insuficiencia probatoria a Raúl Alberto Escalante, único acusado por el homicidio calificado mediando violencia de género de Salazar, ocurrido en 2016, y ordenó que se realice un nuevo debate.
Asimismo, la imputación hacia los padres de la joven se dio porque el día de la lectura de la sentencia, ocurrido en abril del año pasado, se sintieron afectados por la absolución de Escalante. Esto se generó una reacción con disturbios y posterior daños leves en el edificio del TOP Nº 1.


Martes, 26 de noviembre de 2019