MATERNIDAD TEMPRANA EN CORRIENTES
En esta provincia, el 20% de las madres adolescentes tienen dos o más hijos
Unas 3.600 correntinas menores de 19 años dieron a luz en 2017. Los datos estadísticos muestran que el 20 por ciento de ellas no son madres primerizas sino que ya tienen uno o dos hijos. Estas cifras fueron suministradas por el Ministerio de Salud Pública de la Nación, trabajo que demuestra además; que la mayoría de estos embarazos no fueron planificados.
Según las Estadísticas Vitales de 2017 (última disponible), nacieron en la Argentina 704.609 bebés. De este total, 94.079 fueron hijos/as de mujeres adolescentes; lo que representa en promedio 258 nacimientos por día. Se trata del 13,6 por ciento del total de los nacimientos de ese año: 2.493 (0,4%) correspondieron a adolescentes menores de 15 años y 91.586 (13,2%) a adolescentes con edades entre 15 y 19 años.
Otro aspecto que destaca el informe es que si bien para la mayor parte (78%) de las adolescentes que tuvieron un hijo en 2017 en el país, éste fue su primer hijo, para un 18% de ellas fue su segundo hijo y para el 4% se trataba de su tercer hijo o de uno posterior.
Chaco y Misiones se destacan por ser las jurisdicciones con mayor porcentaje de mujeres adolescentes que tuvieron un hijo en 2017 habiendo ya tenido al menos otro previamente. En el caso de la primera, se trata del 23,4% del total, en Misiones el 25,5%.
En tanto, ese año en Corrientes, 3.518 bebés nacieron de madres de 15 a 19 años, y 123 de menores de 15. Aquí, el 20 por ciento ya había experimentado la maternidad. La provincia se ubica detrás de Chaco, Misiones, Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y Salta.
NO PLANIFICADOS
El 67,5 por ciento de las adolescentes que se convierten en madres cada año no buscaban quedar embarazadas, pero casi el 80 por ciento no venía utilizando ningún método anticonceptivo para evitarlo, según el informe “Situación de Salud de las y los Adolescentes en la Argentina” elaborado por Salud Pública y Unicef.
Un embarazo no planificado sucede por muy variadas razones: a veces por no saber cómo cuidarse, otras porque el método anticonceptivo falla -o se usa mal- y otras porque las personas decidieron arriesgarse y no usar ningún método. Las chicas también quedan embarazadas contra su voluntad por violaciones, abusos sexuales o porque el varón las “convence” con insistencia o amenazas de no cuidarse y ellas acceden por no poder negociarlo, por vergüenza o temor a que las dejen, situaciones todas de clara violencia.
Los especialistas advierten que los embarazos en la adolescencia, especialmente en las menores de 16 años, son considerados de alto riesgo, o sea que requieren cuidados y controles prenatales más seguidos y en profundidad por posibles problemas. Asimismo, las carencias alimenticias y nutritivas también son más frecuentes, como la anemia y otras avitaminosis y por eso frecuentemente sus hijos son niños de bajo peso al nacer.
PREVENCIÓN
Para evitar el embarazo adolescente no intencional, en las escuelas y centros de salud de Corrientes -y de otras provincias- se implementa un programa nacional que brinda consejerías sobre educación sexual integral, salud reproductiva y métodos anticonceptivos.
En ese marco, en Corrientes ya se aplicaron más de 3.800 implantes subdérmicos a adolescentes como método anticonceptivo de larga duración, en hospitales y centros de salud. También se colocan otros métodos, como el dispositivo intrauterino.s
LOS EMBARAZOS ADOLESCENTES SON CONSIDERADOS DE ALTO RIESGO Y NECESITAN MÁS CONTROLES.
Cómo atender a las menores de 15 años que están embarazadas
La Secretaría de Gobierno de Salud y Unicef presentaron el documento “Atención de niñas y adolescentes menores de 15 años embarazadas”, una serie de lineamientos para facilitar la asistencia y los recursos necesarios para ofrecer una atención de calidad, integral, humanizada y respetuosa de los derechos de las niñas y adolescentes.
El material está dirigido, principalmente, a integrantes de equipos de salud y a organismos del Sistema de Protección Integral de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes que tienen la responsabilidad de detectar y asistir a niñas y adolescentes con capacidad de gestar que están en situación de embarazo. Además, traza una ruta de atención para la recepción y asistencia atenta y libre de prejuicios que garantice el cumplimiento de los derechos sexuales y derechos reproductivos consagrados por la Constitución Nacional y los tratados de derechos humanos.
La directora nacional de Maternidad, Infancia y Adolescencia, Diana Fariña, dijo que “según los datos de 2017, nacieron 2.493 niños de madres menores de 15 años, que corresponde a 0,35% de todos los partos”.
La funcionaria nacional agregó que “de los 2.493 hijos de madres de menos de 15 años, 500 nacieron de mamás o niñas, de 10, 11, 12 y 13 años. Estas 500 niñas fueron probablemente a consultar a un centro de atención primaria, donde primero las atendió un pediatra o un generalista, por eso es tan importante el rol de las personas y los profesionales que están en el primer nivel de atención, de detectar, de estar atentos a los signos totalmente inespecíficos de una niña de esta edad que probablemente transitó una situación de abuso y está embarazada. Este material lo hicimos para eso, para que el profesional se sienta guiado sobre cuáles son los pasos a seguir”.
Domingo, 11 de agosto de 2019
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