SALUD
Síndrome de intestino irritable: ¿qué alimentos no deberíamos comer?
El síndrome de intestino irritable se compone de ciertos síntomas muy fáciles de detectar: hinchazón y gases, dolores abdominales, constipación o diarrea al menos una vez por semana durante tres meses. Esta afección está fuertemente vinculada al estrés y la mala alimentación.
Se calcula que el síndrome de intestino irritable afecta a 1 de cada 10 argentinos. “Es una de las afecciones que más impacto tiene en la calidad de vida. Además, es la segunda causa de ausentismo laboral”, afirma Rubén Olmos, de la División Gastroenterología del Hospital de Clínicas en una entrevista a Clarín.
“Se suele confundir al síndrome de intestino irritable con intolerancia a la lactosa, celiaquía y hasta cáncer de colon; por lo que es fundamental acudir al gastroenterólogo cuando aparecen los primeros síntomas”, agrega el especialista.
Además, explica que en personas menores de 50 años que no presentan síntomas de alarma (sangre en la materia fecal, pérdida de peso significativa, fiebre, etc) y tienen un examen físico y análisis de sangre normales, no hace falta hacer ningún estudio específico y el diagnóstico se realiza en base a los criterios clínicos.
Sin embargo, en mayores a 50 años o con síntomas de alarma se deben indicar una serie de tests diagnósticos que incluyen endoscopias. “Luego del diagnóstico se requiere de una evaluación médica para identificar los posibles desencadenantes de los síntomas, entre los que se encuentran principalmente el estrés en personas predispuestas y otros factores emocionales, aunque también los hábitos alimenticios”, explica el gastroenterólogo.
Con respecto al posible control de los síntomas, Olmos asegura que esto es posible “haciendo algunas modificaciones en el estilo de vida, la alimentación y trabajando sobre el estrés”. “En algunos casos es necesario utilizar medicación, que será indicada por el médico”, agrega.
“Hay una serie de alimentos agrupados bajo el acrónimo FODMAP s, que por un proceso de fermentación bacteriana pueden generar síntomas. En este grupo se encuentran alimentos tan variados como los lácteos, las harinas de trigo, muchas frutas y verduras y algunos productos industrializados”, asegura el especialista.
Rubén Olmos también asegura que el síndrome de intestino irritable no puede provocar cáncer. “Se trata de un trastorno benigno que no predispone ni evoluciona a cáncer. Es importante igualmente que las personas de 50 años realicen los test correspondientes para detectar precozmente cáncer de colon”, explica.
Y con respecto a una posible cura, afirma: “Se trata de un trastorno crónico que evoluciona de manera recurrente o intermitente en función de la exposición o no de las personas predispuestas a los factores desencadenantes. El objetivo del tratamiento es el control de los síntomas, no la cura”.
Martes, 4 de junio de 2019
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