ATAQUE EN EL CONGRESO
Una venganza personal, la principal hipótesis de la agresión a metros del Congreso
Padre e hijo eran buscados anoche por la policía, acusados de asesinar por venganza al funcionario del área de energía Miguel Marcelo Yadón y de balear a Héctor Olivares, diputado nacional (UCR) por La Rioja, a casi doscientos metros del Congreso, en una de las zonas con más cámaras de seguridad de la ciudad.
Olivares y su amigo, quien se desempeñaba en el Fondo Fiduciario del Transporte Eléctrico de La Rioja, fueron atacados a las 6.51, cuando realizaban una caminata aeróbica en la Plaza del Congreso. Los agresores conocían la rutina de las víctimas y los esperaron para concretar el ataque a bordo de un automóvil estacionado en Avenida de Mayo y Sáenz Peña.
Si bien los investigadores sospechan que el móvil del homicidio fue una venganza contra Yadón, intentaban establecer cuál era el vínculo entre los prófugos y la víctima.
El legislador continuaba anoche internado en la sala de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía. Allí fue sometido a una operación de más de cuatro horas y media, en la que los médicos intentaron detener las hemorragias provocadas por el balazo que ingresó por el estómago y le afectó el intestino, el hígado y el páncreas. En el parte médico difundido por las autoridades del hospital se remarcó el estado crítico del diputado.
Anoche, efectivos de las policías Federal y de la Ciudad realizaban una serie de allanamientos en domicilios de integrantes de la comunidad gitana ante la presunción de que hubieran dado refugio a los imputados. Los investigadores establecieron que la hija del mayor de los prófugos ayudó en la fuga.
Tanto las víctimas como los sospechosos del homicidio viven en un radio de trescientos metros y en la misma zona del ataque. Yadón y el diputado Olivares habitan en un mismo edificio, pero en departamentos distintos, a una cuadra del lugar donde los balearon.
Viernes, 10 de mayo de 2019
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