Un gran tema que aqueja a muchas adolescentes es el de los famosos "granitos" en la cara. No es suficiente haber tenido acné durante la adolescencia e incluso en la edad adulta, que cuando se logra erradicarlo por completo o descender al mínimo los brotes, quedan recuerdo marcas y manchas rojas de esa época.

Lo peor es que estas cicatrices suelen tardar en desaparecer y, a veces, pueden llegar a ser permanentes si no se tratan de la forma adecuada. Así que surge la pregunta: ¿qué podemos hacer para evitar esto?, se pregunta la revista Cosmopolitan.

Lo primero de todo es ir al dermatólogo. El especialista es el más indicado para dar con el problema que causa los brotes de acné, tratarlos y después acabar con las cicatrices profundas que se han quedado en la piel. No obstante, hay algunos cuidados básicos que puedes hacer en el día a día para tratar de quitar las marcas del acné. ¿El truco? Productos que reparen y regeneren la piel.


- Utilizá limpiadores suaves que estén libres de ingredientes químicos. Estos pueden empeorar la inflamación producida por los granitos.

- No cometas el error de evitar hidratar la piel dentro de tu rutina facial diaria. Aunque muchos crean que las pieles grasas o con tendencia acneica no pueden usar cremas hidratantes porque favorece la aparición de más granos, lo cierto es que al no hacerlo se produce el efecto contrario. Es decir, si no hidratas la piel como se merece, esta suple la carencia de agua produciendo más grasa. De ahí que los brotes de acné vayan a más. Eso sí, las cremas hidratantes que utilices, tanto de día como de noche, deben estar formuladas libres de aceites para no taponar los poros.

- Incorporá productos que trabajen a nivel celular en las capas más profundas de la piel para estimular la regeneración cutánea.

Con estos pasos habremos avanzado notablemente en el cuidado de nuestra piel.

Lunes, 11 de febrero de 2019