A TODO O NADA
La radicación de una pastera, la prioridad de Gustavo Valdés
La radicación de una pastera en Corrientes a orillas del Paraná es el principal objetivo de inversión que baja desde el gobierno de Mauricio Macri a esta provincia. Horas atrás el gobernador Gustavo Valdés junto al intendente de Ituzaingó, Eduardo Burna, recorrió en el estado de Paraná, Brasil, una planta de celulosa que produce papel marrón y es reconocida por su cuidado del medio ambiente. El objetivo del Gobierno provincial es instalar una industria similar en Corrientes, la cual generaría 700 puestos laborales directos.
Ya en el polémico Presupuesto Nacional 2019, se previó un desembolso de más de 300 millones de dólares para su radicación en el Departamento de Ituzaingó (así lo certifica en sus anexos). Y entre los pedidos de autorización crediticia a tomar en el extranjero por el gobierno de Valdés, justamente aparece una posible línea de préstamo de u$s 400 millones. Bastante casualidad. Asimismo la instalación de una Pastera en Corrientes deberá estar atada a un necesario Proyecto de reforma de la Constitución, que no para pocos, ya tiene un borrador. La posibilidad de radicar un emprendimiento de esta naturaleza, tiene un impedimento redactado en los artículos ambientales de la Carta Magna local, remozada en el año 2007. El compromiso asumido en su oportunidad por el radicalismo en la figura de Ricardo Colombi con fuertes capitales extranjeros y nacionales, que involucra a actuales integrantes del gabinete de Mauricio Macri, no es de ahora. Tanto que el mercedeño en más de una vez, se refirió al tema con duras críticas a las organizaciones ambientalistas, anticipando lo que iba a venir.
TERRENO PREPARADO
El primer síntoma del avance de este emprendimiento fabril, fue el inicio de la construcción del Puerto de Ita Ibate, que actualmente se encuentra un tanto paralizado. Pero para que funcione y se aceite finalmente la idea, se necesita imperiosamente de modificaciones en la letra constitucional correntina. A no ser, que se pase por alto sus preceptos ambientalistas. No hay dudas que en algún momento, se librará una batalla en la justicia, donde el control de los estrados judiciales, por ahora los tiene el poder político de turno: el radicalismo.
Miércoles, 6 de febrero de 2019
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