En un mes, se inicia el ciclo lectivo y los comerciantes sienten la caída en ventas. Ante los incrementos en los precios, las personas deciden adquirir las prendas por separado. A su vez, surgió una nueva modalidad de oferta y demanda entre los padres, con grupos de Whatsapp o Facebook, con ropas que dejan sus hijos.

Los uniformes escolares superan los dos mil pesos en algunos comercios de la Capital correntina. Esta coyuntura de precios elevados instaló una nueva modalidad entre los tutores: la de comprar prendas usadas que se ofrecen en los grupos de padres de Whatsapp y Facebook.

Mientras, los comerciantes esperan expectantes que en febrero se activen las ventas, ya que la crisis económica se hace sentir en todos los rubros.
El ciclo lectivo comienza en un mes y para conocer más sobre los precios de los uniformes, EL LIBERTADOR dialogó con Alejandra, encargada de un conocido comercio del centro capitalino, quien sostuvo que "las personas sólo compran lo justo y necesario".
La vendedora resumió así la tesitura asumida por la gente, de no adquirir varios uniformes, apenas uno para clases normales y uno para educación física, en el mejor de los casos, ya que la mayoría sólo compra algunas prendas de cada conjunto.
A esta escena, se la suma la de las especulaciones en los precios, que se hizo habitual en los últimos tiempos, por lo que las personas además recorren y averiguan en busca de ofertas con descuentos. "Si en otro lugar sale 100 pesos menos, van todos ahí", afirmó la comerciante.

RECICLAR Y
OFRECER LO USADO

Como se dijo, hoy en día los tutores no compran uniformes completos, sino prendas por separado. Ello sucede cuando las familias están conformadas por varios chicos, por lo que "reciclan" las prendas de los mayores y sólo pagan por la que ya se deba cambiar por encontrarse percudida.
También se instaló un mercado paralelo en las redes sociales, donde las compras y ventas entre los tutores se dan en los grupos de Whatsapp y Facebook, donde cada tutor ofrece las prendas que sus hijos ya no utilizan.

INFLACIÓN
CONSTANTE

Los precios obligan a los padres a ingeniarse. Es que, por ejemplo, un pullover va desde 1.500 pesos, según el sondeo realizado.
Otras prendas, como los pantalones, rondan alrededor de los 600 pesos; las medias, los 50 pesos; las remeras, entre los 200 y 300 pesos, y las camisas, desde 500 pesos, entre otros.
Y se debe tener en cuenta que el año pasado, el valor de las indumentarias escolares se incrementó cuatro veces.
En este inicio de año, se mantienen los valores de diciembre, aunque aseguran que podría haber subas dos semanas antes del comienzo de las clases.

UNIVERSITARIOS
TAMBIÉN

Entre prendas de los distintos niveles educativos, la que mayor incremento sufrió fue el ambo universitario.
Alejandra remarcó que pasó de "1.100 pesos a 1.700 pesos".

Viernes, 1 de febrero de 2019