El anfiteatro Cocomarola con los asientos bajo agua, destrozos en la pérgola de la Punta San Sebastián, calles y avenidas anegadas, autos parados y hasta uno incendiado, barrios aislados, cortes de energía eléctrica y una lluvia que se prolongará hasta la tarde del jueves, dejaron a la ciudad de Corrientes a merced del caos.

Durante la noche, familias enteras luchaban para sacar el agua de sus casas, y salvar sus pertenencias. Nula asistencia estatal, a pesar de que se anunció desde hace una semana sobre la ocurrencia de este fenómeno.

Miércoles, 9 de enero de 2019