YA NO SE PUEDE MAS
YPF aumentó los combustibles y ya se anticipan nuevas subas
El aumento se da porque el precio internacional del petróleo está en alza, y el Gobierno no fija límites a la desregulación del mercado.
Una semana después que sus competidoras, YPF ajustó ayer los precios de los combustibles en un 3% promedio país, por debajo de las alzas que aplicaron las otras refinerías. Las naftas súper y premium subieron un 3,5% a $28,97 y a $31,99 respectivamente, mientras el gasoil común se incrementó un 4,5%, a 24,25. y el premium un 2,5% a $28,31.
El aumento coincidió con un nuevo avance del petróleo en el mercado internacional. El barril del Brent de referencia en la Argentina superó durante la jornada los u$s73 dólares por barril por primera vez desde noviembre de 2014, impulsado por nuevas tensiones en Medio Oriente, y finalmente cerró a u$s72,06, con un alza del 1,44% con relación al día anterior.
Por los problemas en Siria, una actitud más aperturista de la economía china y la aspiración de Arabia Saudita de ir llevando la cotización hacia u$s80, los analistas internacionales coinciden en que puede esperarse que el crudo consolide una tendencia al alza en los próximos meses, lo que anticipa nuevos aumentos de los combustibles en el mercado local.
Esta perspectiva abre interrogantes sobre la desregulación que decidió el Gobierno en septiembre pasado. Según algunas opiniones, la actitud más cautelosa de YPF con los valores al público se relaciona con la creciente influencia del vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, en las decisiones de la petrolera, y a una posición más activa del Gobierno para contener los índices de inflación.
Tras la liberación del mercado local, el criterio explícito del ministro de Energía, Juan José Aranguren, es que en ese contexto, el límite a los precios sólo lo pone la demanda. Es decir, no hay límite fijado a partir de los costos en los que incurren efectivamente las refinadoras.
Pero aun considerando que los precios en los surtidores se relacionen con el precio internacional y el tipo de cambio, por ser el crudo un commodity que se comercializa en dólares, el Gobierno por ahora parece no atender a cuál es la incidencia del crudo y cuántos de los costos están realmente dolarizados.
Aunque el mercado se liberó en septiembre, el primer aumento en los surtidores se produjo el 23 de octubre, un día después de las elecciones legislativas. Entre el día previo a los comicios y ayer, YPF, la empresa que aplicó menos aumentos, subió un 27,8% el precio de la nafta súper, un 31,1% el de la premium, un 29,9% el gasoil común y un 29,1% el de más calidad.
A su vez, desde el 20 de octubre, el petróleo Brent avanzó un 24,78% y el tipo de cambio, un 15,2%, lo que significa que un barril de crudo local de igual calidad que el Brent subió en pesos un 43,7% desde el viernes previo a las elecciones.
En el precio del combustible al público hay una parte que es el precio de refinería que incluye el 10% o 12% de biocombustibles para el gasoil y la nafta respectivamente, los salarios, los servicios y el mantenimiento, todos valores no dolarizados. De este modo, puede estimarse que menos del 40% del precio de refinería debería ajustarse por los avances en el crudo internacional y el dólar.
Por otra parte, el etanol y el biodiésel se pagan según los valores fijados por el Ministerio de Energía, verificándose una leve rebaja con relación a octubre en el primer caso, y un alza del 12,8% en el segundo.
Como los impuestos eran un porcentaje del precio de refinería hasta el 1 de marzo (el IVA lo sigue siendo), y el margen del estacionero también es una proporción de ese valor, se entiende que estos ítems se ajustaron en igual proporción, lo que debería derivar en un aumento promedio del 25% al público, inferior a los aplicados.
Si esto es así, ésa sería la verdadera causa de los tironeos en el Gobierno, que por ahora sólo se visualizan como una disputa de poder entre Quintana y Aranguren.
Jueves, 12 de abril de 2018
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