Se trata del hombre que fue detenido la semana pasada luego de la denuncia realizada por la propia víctima. El padre del imputado sostiene que todo es un invento de la ex esposa porque no quería que se vuelva a casar. Asegura que es inocente.

Un hombre que fue detenido la semana pasada en la localidad de Esquina, acusado de abusar de su propia hija y tener familia con ella, está dispuesto a realizarse un análisis de ADN para probar que no es el padre de la criatura.

Mariano Escobar, padre del detenido por supuesto abuso de sus propias hijas, hizo su descargo. “Mi hijo está detenido injustamente. Es un invento de la madre de ella. Estoy acá para luchar por él, quiero que salga de la cárcel”, manifestó en declaraciones a Actualidad Esquina.

Muy afligido y sollozando por las fotos que trascendieron de su hijo en las redes sociales en donde se lo acusa de haber abusado de su hija, manifestó que fue acusado y detenido injustamente y sostiene que es un invento de la madre de su nieta.

Según Escobar, todo es una estrategia para que su hijo no se case, debido a que tenía fecha para hacerlo por civil esta semana.

Explicó que los hijos que tiene la joven son de una pareja que ella tenía en Entre Ríos y agregó que el acusado está dispuesto a realizarse el análisis de ADN para demostrar que no es el padre de las criaturas.

Escobar sostiene que su hijo es inocente y que va a hacer lo necesario para que recupere su libertad. Cabe recordar que todo comenzó con la denuncia de una joven quien manifestó que desde hacía cinco años era sometida sexualmente por su padre.

“Todo empezó cuando tenía 14 años, una noche fuimos a dormir y él entra a mi habitación, me tapa la boca y empieza a abusar de mí, me dijo que me calle que no haga ningún tipo de ruido porque me iba a asfixiar, entonces no me quedó otra que callarme y aguantarme”, relató la víctima.

Añadió que “al otro día me dice que si abría la boca, iba a matar a uno de mis hermanos que trabajaba con él, pensé que iba a pasar una sola vez, pero siguió sucediendo”.

La joven admitió que “intenté quitarme la vida, me descubrió y me pegó, cuando me negaba a tener relaciones con él esperaba el momento de la cena y le pegaba violentamente a mi hermano, se desquitaba con él, hasta llegó a ponerle un cuchillo en la garganta, después se calmaba”.

Luego, añadió otro dato sorprendente: “Quedé embarazada y me tuve que poner de novia con uno de sus compañeros de trabajo, Pasado el tiempo, creció mi panza y mi pareja me dijo ‘ese no es mi hijo’, siempre lo negó porque sabía que no era de él, siempre traté de hacerle creer que sí”.

El Litoral.


Miércoles, 8 de noviembre de 2017