PURO AMOR
Se quedaron en su casa para hacer frente al ciclón y salvar a sus siete perros
Sobrevivieron a la tormenta al ubicarse en el techo de la casa de un vecino junto a sus mascotas, mientras su vivienda se inundaba.
Sobrevivieron a la tormenta al ubicarse en el techo de la casa de un vecino junto a sus mascotas, mientras su vivienda se inundaba
Una pareja de Yauco, un barrio en el suroeste de Puerto Rico, donde golpeó el huracán María la semana pasada, logró salvar a sus siete perros mientras sobrevivían a la tormenta en su casa con el agua que les llegaba hasta el cuello.
Sandra Harasimowicz, polaca, y Gary Rosario, puertorriqueño, lograron mantenerse fuera de peligro al huir junto con los perros al techo de la casa de un vecino. "Las aguas entraron a la casa "como si fuera el fin del mundo" contó la mujer.
La tormenta dejó al menos 10 muertos en la isla y convirtió a la calle donde vivía la pareja en un depósito de escombros y barro luego de que un río cercano se desbordó.
Tratando de mantener cerca a los animales durante el huracán, aferrándose a los paneles solares del techo del vecino, Harasimowicz dijo que vio con horror cómo uno de los perros saltó cuatro veces hacia el torrente que inundaba la calle.
Pero cada vez que lo hizo, Rosario, que es guardia nacional, saltó tras el perro para ponerlo a salvo.
"Pensé que iba a perderlo; él lo hizo porque es un amante de los animales", dijo la mujer. "Yo dije 'estoy perdiendo a los animales y estoy perdiendo a mi esposo'".
Madre de dos hijos de 6 y 12 años, Sandra explicó que antes había escondido a sus ocho gatos en la parte más alta de los armarios de la cocina para resguardarlos durante la inundación.
Los niños habían sido enviados a la casa de un amigo antes de la irrupción de María. Y después de fracasar en encontrar un refugio para los perros y gatos, Harasimowicz dijo que pensaron que debían quedarse ahí con los animales, en parte porque no creyeron que la tormenta sería tan intensa.
"Básicamente lo subestimamos", dijo la mujer sobre el huracán que derribó la energía y las telecomunicaciones en esta isla de 3,4 millones de habitantes, dejando un caos del que los residentes creen que les costará meses recuperarse.
Jueves, 28 de septiembre de 2017
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