POR WILFREDO OVIEDO
Sospecha permanente
Es difícil dar un pronóstico en Corrientes de lo que puede pasar en este año electoral, son muchas las variantes y no solo juegan los candidatos, los aparatos o la caja del estado.
Proyectar lo que paso el 13 de agosto al 8 de octubre puede resultar engañoso, si bien es cierto que ECO va a recibir la visita de funcionarios nacionales, este partido se juega con jugadores locales y es imposible acertar lo que vaya a decidir el pueblo cuando llegue el día de ir a votar. Lo que debiera ser una competencia electoral cargadas de propuestas donde cada partido o alianza pone a su mejor candidato se ha convertido en un vale todo, como si la democracia no tuviera reglas. En Corrientes las elecciones no gana el mejor proyecto o el mejor candidato sino quien tiene más injerencia en la justicia, como si se tratara de una película de mafia donde es tan grande la corrupción y la cadena de complicidades que es imposible dimensionar las consecuencias nefastas que esta práctica puede tener para la sociedad Analicemos algunos temas: Ignacio Osella le pidió a Ricardo Colombi que lo saque de la cancha a Bassi para poder ganar después de 8 intentos fallidos en que perdió de manera consecutiva, pero la discusión de fondo debería ser si Bassi puede o no ser candidato a intendente por segunda vez. ¿Si puede es porque la constitución lo permite? ¿Si no puede es porque la justicia tiene orden de impedirlo? ¿La justicia actuara con independencia en el caso de Bassi? Está claro que en la medida que la estrategia de ECO sea dirimir la cuestión electoral en la justicia con los jueces amigos, el daño institucional será tan grande que no es difícil imaginar muchos años más de atraso, postergación y de pobreza para los correntinos. No porque gane un candidato de ECO sino porque ese candidato es favorecido por la corruptela instalada en la justicia. Los jueces no están para favorecer ni perjudicar a nadie y mucho menos para elegir quien gobierna y quien no en la provincia. No es bueno vivir en la sospecha permanente y gran parte de esa sospecha lo dan los propios funcionarios del poder judicial. ¿Está bien que 3 ministros del STJ tengan intereses directos con la lista de eco? Cualquiera podrá decir que nada lo impide, pero ningún estado tiene futuro si los hombres y mujeres encargados de fortalecer las instituciones se venden al mejor postor.
Miércoles, 30 de agosto de 2017
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