El intendente de la localidad de Itatí, Salvador Lugo, fue consultado al respecto de las posibles causas de los dos hechos que llamaron la atención ayer, cuando había una gran cantidad de peregrinos, por el 117º aniversario de la Coronación Pontificia de la Virgen Morena. Respecto del hundimiento del pavimento en una calle a dos cuadras de la Basílica, atribuyó el hecho al peso del colectivo sobre el pavimento y a lo sucedido en la Costanera, el socavamiento del agua y la cantidad de gente en el momento del encuentro de las imágenes de Itatí y Caá Cupé.

Salvador Lugo, intendente a cargo de la localidad de Itatí, dialogó con Sudamericana sobre los dos hechos que llamaron la atención ayer, en el marco de la fiesta en honor a María de Itatí. El primero de ellos fue el hundimiento del pavimento por el paso de un colectivo. Relató que el rodado se hundió, generando un socavamiento de alrededor de 10 metros de diámetro en una esquina que se encuentra a dos cuadras de la Basílica.

Deslizó que el hecho pudo deberse a la rotura de un caño de desagüe, pero aclaró que no hubo heridos y que el colectivo pudo retirarse después.

Por otro lado, ayer, mientras una muchedumbre permanecía en la costanera local, aguardando el arribo de la Virgen de Itatí y la de Caacupé, un sector del paseo se desmoronó y provocó que 15 feligreses -oriundos de Rosario y Buenos Aires- sufrieran heridas de distintas consideraciones. En forma inmediata, personal del hospital local concurrió al lugar para rescatar a los damnificados. Tras las primeras atenciones, a tres personas se las derivó a Corrientes.

En este sentido, Lugo comentó que él mismo recorrió la zona días antes y no notó nada extraño, por lo que consideró que el peso de la gran cantidad de gente y el socavamiento producido por el agua, ocasionaron el hundimiento. Por ello, adelantó que de manera preventiva, se clausuraría al menos esa parte del paseo costero.


Lunes, 17 de julio de 2017