La Justicia condenó a 20 años de prisión a Verónica González de 39 años por asesinar a su hijo Bautista, de cuatro, asfixiándolo con una almohada. El hecho ocurrió en octubre de 2016 en su casa en San Rafael, Mendoza y fue la segunda Cámara del Crimen de esa ciudad quien dictó la sentencia.

El tribunal rechazó los atenuantes presentados por la defensa de González sobre un estado de esquizofrenia y sufrimiento psicológico y consideró a la mujer imputable por estar consciente del acto criminal en medio de un lapsus de ira y descontrol ante un "berrinche" del niño.

Florencia Garciarena, abogada de la acusada había solicitado una pena de ocho años y un tratamiento psicológico ya que según ella, su clienta atravesaba una "situación motivacional anormal" basándose en distintos tramos de su vida: la muerte temprana de su madre, los abusos sexuales por parte de su padre y el proceso legal por filiación que tiene con el padre del nene asesinado, según lo informó el diario Los Andes.

El asesinato del pequeño Bautista ocurrió en octubre de 2016 cuando su madre, Verónica González, lo asfixió con una almohada entre la medianoche del lunes 17 y la madrugada del martes 18. La mujer pasó unas horas junto al cuerpo hasta que telefoneó a su psiquiatra para relatarle lo ocurrido. Fue el profesional quien llamó al 911 y la policía llegó en poco tiempo a la casa que la mujer, quien también es madre de una adolescente, alquilaba en Los Franceses al 1600, en San Rafael, Mendoza.

Una vez allí las fuerzas policiales, González confesó lo que había hecho y mostró marcas de una lesión provocada por ella misma.




Miércoles, 5 de julio de 2017