Un nuevo reclamo de la ciudadanía hace pie en el hospital Fernando Irastorza, de Curuzú Cuatiá. La falta de estructura sanitaria queda más en evidencia ante la creciente demanda poblacional. Esta vez los ciudadanos se hicieron eco de un pedido urgente de una curuzucuateña que padece una enfermedad no convencional, por lo que necesita ser atendida por un neurólogo especializado, pero esta especialidad no cuenta con un especialista en el establecimiento sanitario.

Quedan sin tratamiento pacientes con desórdenes de la personalidad, enfermedades raras, síndromes y patologías geriátricas específicas.


Así, volvió a surgir el viejo reclamo de los vecinos para que en el hospital cabecera existan diferentes especialistas. Johanna Shmagalsk, de 25 años, vive en Curuzú Cuatiá y desde hace tres años padece el síndrome de pseudotumor cerebri, también conocido como hipertensión intracraneana idiopática, una enfermedad enmarcada dentro de las enfermedades raras.

Johanna comentó a Radio FM Total que necesita que los vecinos la ayuden a juntar firmas para que en el hospital Irastorza pueda haber un neurólogo especializado en estas enfermedades, y así poder ser atendida todos los meses. “Si se logra la presencia de este médico, no sólo me va a ayudar con mi enfermedad, sino que también a muchos chicos que sufren otras enfermedades similares”, dijo. Johanna elevó el pedido a través de la plataforma web Change.org, donde necesita seis mil firmas para alcanzar las 25 mil requeridas. La nota está dirigida al ministro de Salud Pública de Corrientes, Ricardo Cardozo.

“En mi ciudad, Curuzú Cuatiá, tenemos un hospital grande, el Fernando Irastorza, pero no cuenta con todos los especialistas necesarios, entre ellos un neurólogo. Es sabido que hay muchas enfermedades nuevas, y muchas de ellas son neurológicas, y si no se detectan a tiempo es más riesgoso. No olvidemos que existen pacientes con desórdenes como hiperactividad, hiperquinesia, déficit de atención. También hay personas mayores que necesitan neurólogos en la ciudad. Pero, en Curuzú solo hay dos neurólogos en clínicas privadas y tiene un alto costo atenderse de esta manera. Más de un médico del hospital ni siquiera sabe de esta enfermedad”, dijo la joven.

Martes, 7 de marzo de 2017