Con críticas de los gremios e integrantes del fuero, la medida se integra en el marco de buscar una justicia más "equitativa", según palabras del Presidente. El fantasma de la flexibilización.

El Gobierno nacional avanza en su intención de modificar la Justicia laboral, a la que el propio Presidente señaló como tendenciosa hacia un sector, el de los trabajadores. Con el fantasma de blindar la flexibilización laboral, firmará con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el traspaso a la Ciudad. El acto está pautado para las 9 de la mañana.



La medida es resistida por gremios judiciales y jueces, quienes advierten que de esta manera Cambiemos podrá designar cerca de 30 magistrados en el fuero en un ámbito, el del Consejo de la Magistratura porteño, que dominan claramente. Además, advierten los problemas de jurisdicción que tiene esta medida, ya que no está claro si una causa laboral terminará en el Tribunal Supremo de la Ciudad o se agregará una instancia más: la Corte Suprema.

El acuerdo entre la Nación y la Ciudad se realiza mientras sigue en stand by el proyecto de ley que envió al Senado de la Nación, y el cual establecía el traspaso de todos los tribunales nacionales radicados en la Ciudad al ámbito porteño. Tal como deslizaron en su momento fuentes del Ministerio de Justicia a El Destape, en el acuerdo el fuero laboral, junto con el penal, es uno de los primeros en cambiar de jurisdicción.

El proyecto establecía que Nación y Ciudad debían firmar un acuerdo, ya que la letra dejaba abierta su implementación al mismo. Antes de que ese proyecto se debata en el Congreso, Macri ya le pone el texto a la reforma.

El avance macrista se da luego de la confesa intención de modificar los convenios colectivos de trabajo como forma de conseguir mayor productividad. O, dicho de otro modo, reducir salarios para hacer más competitiva la economía.

Jueves, 19 de enero de 2017