COPA ARGENTINA
Rosario Central se impuso ante Belgrano y avanzó a la final de la Copa Argentina
En Formosa, se impuso 2-0 con goles de Marco Ruben y Walter Montoya y espera por el ganador de River-Gimnasia, que se enfrentan este jueves. Los rosarinos llegan a la instancia decisiva por tercera vez consecutiva: cayeron contra Huracán (2014) y Boca (2015).
Rosario Central lo hizo de nuevo. Otra vez está en la final de la Copa Argentina, tras vencer en un partido muy caliente a Belgrano 2-0 con goles de Marco Ruben y Walter Montoya. Ahora espera por el ganador de Gimnasia-River, que jugarán este jueves en San Juan.
Es la tercera final consecutiva de los rosarinos en este campeonato. Perdieron por penales contra Huracán en 2014 y el año pasado cayó frente a Boca en la escandalosa definición, con el mal arbitraje de Diego Ceballos que perjudicó a los rosarinos. ¿La tercera será la vencida?
El partido arrancó trabado, más peleado que jugado. En ese escenario, Belgrano tuvo las mejores chances y Matías Suárez era el más claro del equipo de Leonardo Madelón. Jorge Velázquez no alcanzó a definir bien ante la salida de Sosa y del otro lado Walter Montoya respondió con un bombazo desde afuera del área que salió cerca del ángulo.
Central dependía mucho de lo que pudiera hacer su figura, Giovanni Lo Celso, pero el pibe, que encaraba para adelante, quedaba enredado entre las piernas de los defensores del equipo cordobes.
El partido avanzaba y perdía claridad. Los jugadores se dedicaban a protestar y el árbitro Jorge Baliño sacaba amarillas para todos lados, sin lograr mantener el trámite a rienda corta.
La roja a Guillermo Farré, por un planchazo a Teo, a los 44 minutos del primer tiempo, fue una consecuencia lógica de lo que se reflejaba en la cancha. El mediocampista de Belgrano ya estaba enfurecido por un encontronazo con Mauricio Martínez (el de Central le tiró un manotazo), que no alcanzaron a ver los árbitros.
La expulsión cambió el partido. El segundo tiempo se jugó con absoluto dominio de Central, que tenía la pelota y el terreno. Belgrano se retrasó demasiado y solo apostó al contraataque.
Así empezó a jugar Lo Celso, que casi abre la cuenta con un buen zurdazo de volea que rozó el poste derecho de Olave.
Eduardo Coudet puso a Washington Camacho para intentar quebrar a la defensa del Pirata, que esperaba de frente.
Pero Central fue y fue. Lo arrinconó. Hasta que alcanzó su premio. Para eso fue determinante la actuación de Teo Gutiérrez, la figura del partido. El colombiano mostró lo mejor de su juego y tuvo sus mejores minutos con la camiseta de Rosario Central.
En la jugada del gol, guapeó por derecha, y desde un ángulo muy cerrado, ya sobre la línea de fondo, sacó un centro excelente al corazón del área. Ahí apareció el goleador, Marco Ruben, que la empujó de cabeza al 1-0.
Y ya sobre el final, con los cordobeses jugados en ataque, llegó el segundo, para liquidar la historia. Y otra vez desde los pies de Teo, que manejó la contra a la perfección, esperó el momento justo para estirar la pelota hacia la corrida de Montoya, que enganchó ante Olave y tocó al arco vacío.
Fue justo porque la expulsión de Farré rompió el partido. Y porque Central se lo llevó puesto en la segunda mitad. Lo quiso ganar y lo logró. Ahora buscará revancha en una Copa que hasta ahora le sienta bien hasta la final.
Jueves, 1 de diciembre de 2016
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