La modelo atraviesa ciertos trastornos típicos del post parto y lejos de ocultarlos contó algunos detalles en las redes sociales. Todos los detalles en esta nota.

El presente de Zaira Nara es casi perfecto. La afirmación es fácilmente deducible: su hija Malaika la llena de felicidad y la sorprende día tras día con su crecimiento y belleza. Su marido Jakob von Plessen es un churrazo, buen padre y además tiene una billetera por demás abultada. Su nueva casa está ubicada en un exclusivo country y cuenta con todo el confort y un diseño vanguardista. Hasta acá, todo lo bueno.
Ahora abordaremos lo que empaña un poquito esa plenitud, el ying y el yang que habita en todo ser humano. Ojo, no es algo oculto. Zaira misma se ocupó de hacerlo público con una publicación en su cuenta de Instagram titulada “El #Postparto y la caida del pelo”.
Resulta que una de las consecuencias negativas de su reciente maternidad es la pérdida de cabello, por eso, la hermana de Wanda tuvo que ir a una peluquería para hacerse un tratamiento que la ayude a hidratar y restaurar su pelo. Sus vicisitudes de madre primeriza quedaron enmarcadas en un hashtag creado por ella, titulado #ZaiPostParto. ¡Vamos, che, no es para tanto!

Jueves, 2 de junio de 2016