Ayer el ministro de Coordinación y Planificación, Eduardo Vischi, suscribió junto a un representante del Rector del Santuario un acuerdo para los trabajos, que demandarán casi 2 millones de pesos. Tras la mejora, impulsarán la posibilidad de tener visitas guiadas como atracción turística. El techo y el camarín de la Virgen son lo más dañado.

Finalmente las obras para reparar las goteras en los techos, las filtraciones en el camarín de la Virgen y los daños que hacen peligrosa la visita a la terraza (clausurada desde hace dos años) podrán ser licitadas y comenzarán a ponerse en marcha ni bien haya una empresa al frente de los trabajos.

Ayer, en representación del Gobierno provincial, el ministro Eduardo Vischi se reunió con el padre Damián Picone, director del Cottolengo Don Orione de la localidad, quien concurrió en representación del Rector de la Basílica. En en el encuentro se suscribió un convenio para las obras de refacción de la Basílica, que le significará a la Provincia un desembolso que ronda los dos millones de pesos.

Así, desde Itatí esperan ahora que en un corto plazo el Gobierno provincial convoque al llamado para licitar las obras y, sobre todo, que éstas no demoren en comenzar.

“Es algo muy esperado”, refirió a época el sacerdote Damián Picone. “Las gestiones con los proyectos para estas refacciones se empezaron a impulsar desde que el padre Roberto Simionato se hizo cargo de la Basílica”, recordó. De eso pasaron ya más de dos años.

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“Se esperaba que la refacción se pudiera concretar antes de los festejos por los 400 años de Itatí. No pudo ser. Pero ahora al menos entrará dentro del año de tan señalado aniversario”, sostuvo Picone.

Cuando el padre Simionato fue convocado por la orden de Don Orione a otras tareas en Buenos Aires, lo reemplazó en enero pasado el padre Gustavo Omar Cadenini. “Cuando pidieron los datos de un referente de la Basílica fue en esa transición. Por eso se registró mi nombre y me tocó a mí la firma del convenio”, explicó Picone.

Según detallaron luego del encuentro, la refacción se centrará principalmente en el arreglo de las goteras y filtraciones en los techos del Santuario y también dentro del camarín de la Virgen, un recinto que no pudo ser utilizado para realizar el tradicional cambio de vestimenta de la imagen en los últimos festejos religiosos, precisamente por el mal estado del lugar.

Pero además, las reparaciones alcanzarán a la terraza, un sitio que resulta de gran disfrute para los visitantes por la posibilidad de avistar el río y toda la ciudad, a la vez de contemplar la cúpula de la Basílica de cerca, y que sin embargo se encuentra clausurada desde hace dos años por el riesgo que supone ingresar allí.

CONCURREN ALLÍ MILES DE PEREGRINOS. SÓLO EN JULIO LA VISITAN 300 MIL PERSONAS.
CONCURREN ALLÍ MILES DE PEREGRINOS. SÓLO EN JULIO LA VISITAN 300 MIL PERSONAS.

“Pretendemos que luego de las reparaciones el lugar pueda volver a habilitarse, pero esta vez con visitas guiadas. Puede ser una oportunidad para los jóvenes itateños que están comenzando sus estudios de turismo. De esta manera se podrán implementar recorridos para apreciar el valor arquitectónico, religioso e histórico que tiene el edificio”, evaluó Picone.

El último arreglo a esta parte de la Basílica se había hecho en 2005. Pero el deterioro también se debe en parte a la concurrencia masiva de personas a los techos cercanos a la cúpula, con lo cual el espacio se habría ido degradando. “Se encuentran hasta grafitis con aerosol”, relató Picone.

Vale remarcar que a Itatí, y en particular al Santuario, concurren cada año más de tres millones de visitantes, que se concentran especialmente durante los festejos del 16 de julio.

Viernes, 4 de marzo de 2016