Le ganó 3-0 en Montevideo con goles de Godín, Pereira y Cáceres. Los de Tabárez se desquitaron así de la derrota de la Copa América el día del episodio entre Jara y Cavani.

El recuerdo de la noche del estadio Nacional de Santiago, de los cuartos de final de la Copa América, jugó esta noche en el Centenario de Montevideo. Y allí Uruguay se tomó una dulce revancha de Chile: lo goleó por 3-0 en un partido caliente, con el morbo del reencuentro entre Gonzalo Jara y Edinson Cavani, tras el episodio en el que el chileno "tocó" en la cola al charrúa. Diego Godín, Alvaro Pereira y Martín Cáceres hicieron los goles del conjunto de Tabárez, que quedó como único escolta de Ecuador, el líder de las Eliminatorias.

Los goles del conjunto del Maestro los anotaron tres defensores, Diego Godín, a los 22 minutos de la primera etapa, Alvaro Pereira a los 15 del segundo (dos después de ingresar) y Martín Cáceres cuatro más tarde. Uruguay, con el triunfo, llegó a 9 unidades y quedó a tres de Ecuador, cómodo líder del certamen; en tanto que Chile, con la caída, se quedó con 7 puntos.

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El encuentro tuvo un desarrollo áspero desde el inicio, con el incidente todavía fresco entre Cavani y Jara, pero también vertiginoso porque los dos equipos buscaron el arco rival. Chile, con un 4-3-3, fue un poco más profundo en ataque, aunque fue Uruguay, con un 4-4-2, el que dio el golpe a los 22 minutos con el gol de Godín, que capitalizó una serie de dudas de la defensa adversaria.

Después el ritmo de juego mermó, el equipo de Jorge Sampaoli se adueñó de la pelota, se plantó en campo rival, aunque generó poco y nada en ataque, mientras el conjunto local se replegó y apostó su suerte en ofensiva a algún contraataque.

Claro que esto se revirtió con el arranque del segundo período, cuando Uruguay volvió por sus fueros y metió nuevamente a Chile contra los palos de Claudio Bravo, haciendo gala de una gran efectividad en la pelota parada y el consecuente juego aéreo. Con mucha intensidad y presión en la segunda pelota, los dirigidos por Oscar Tabárez generaron acciones de primer pase que terminaron en dos goles en apenas cuatro minutos, los que transcurrieron entre los 15 y los 19 minutos, y ambos por sendos cabezazos.

El primero llegó por intermedio del lateral izquierdo de Estudiantes de La Plata, Alvaro Pereira, que reemplazó al boquense Nicolás Lodeiro a los 13 y convirtió a los 15. Y el segundo lo concretó el también marcador de punta por ese costado en la Juventus, de Italia, Martín Cáceres, tras otro centro que llegó, casi calcado con el anterior, desde la izquierda del ataque uruguayo.

Pero no conforme con ello, el conjunto oriental, impulsado por su hinchada que colmó el mítico Centenario, fue por una goleada mayor, histórica, reivindicativa de la eliminación sufrida ante los chilenos en la pasada Copa América. Y si el objetivo no se cumplió en mayor medida fue simplemente porque los dirigidos por Sampaoli, que serán rivales de Argentina el 25 de marzo próximo en el Estadio Nacional de Santiago, fue simplemente porque cuentan con un arquero de nivel internacional como lo es el guardavallas de Barcelona, Claudio Bravo.

Y en el final, mientras Jara y Cavani hacían las paces en la mitad de la cancha, en el borde del campo de juego el árbitro colombiano Wilmar Roldán levantaba dos tarjetas rojas que le impedían a Jorge Valdivia y Mauricio Isla ponerse a pensar en el partido con los argentinos de la quinta fecha de eliminatorias. Arturo Vidal, con dos amarillas, tampoco podrá estar en ese partido.




Miércoles, 18 de noviembre de 2015