Quinn Duane tiene 27 años y tenía el sueño de casarse, pero el día de la boda el novio se arrepintió y, por ese motivo, ella invitó a 120 sin techo a comer a su fiesta para que la comida que ya estaba paga tuviera un buen fin.

La fiesta sería en el Citizen Hotel de Sacramento, Estados Unidos, por la que gastó nada menos que US$35 mil. La recepción ya estaba paga y, por ese motivo y para poder usar ese alimento, invitó a muchas personas pobres de la zona.

Rashad Abdullah, que fue con su mujer y sus cinco hijos, le dijo a la cadena local KCRA que cuando se está atravesando un momento difícil que haya un plan diferente para hacer junto a su familia es una bendición.

Lunes, 19 de octubre de 2015